Darknesswolf88
Dios Rey lobo
Bueno criaturitas aquí les traigo otro fic en el cual estaré trabajando espero sea de su agrado
Jeremy Carter un joven lobo de 17 años de edad se volvió a subir su pantalón, cerrándolos y buscó a tientas su camisa. Estaba oscuro en el cobertizo, habían ido allí por sugerencia de Jeremy. Siendo alto y atlético no le había sido difícil convencer a su compañera Megan una leona. Por mucho que ella había tratado de ignorar el coqueteo al inicio, no había logrado resistirse. Pero mientras Jeremy estaba ocupado buscando su camisa y admirando su cuerpo a la luz de la luna, Megan estaba sentada con un gesto de preocupación, el joven lobo la miró en la oscuridad y dejó de buscar su camisa, la encontraría eventualmente y de todos modos hacía calor, y centró toda su atención en la leona.
"Jeremy, ¿Si tenemos un hijo, como quieres que se llame?" preguntó Megan
Antes que Jeremy pudiera responder, una luz se encendió en el cobertizo. La cabeza de Jeremy giró rápidamente y vio a un corpulento león de pie en la entrada. El león estaba sorprendido por la escena enfrente de él, pero rápidamente superó su estado gruñendo fuerte. Para él joven lupino había duda en el significado de ese gruñido; era momento de irse. Pensando muy rápido, Jeremy corrió hacia la ventana y comenzó a planear su escape, moviéndose a gran velocidad. Vio su camiseta colgando de la cortadora de césped, pero no tenía tiempo de para recogerla, debía huir. Con la entrada bloqueada por el corpulento felino, el joven lobo tomó una decisión rápida, saltó hacia atrás golpeando la ventana del cobertizo rompiéndola con su cuerpo. Al caer al suelo Jeremy notó que el cristal de la ventana lo había cortado en varios lugares, pero no se detuvo mucho, sabía que el león pronto iría tras él, el joven lobo buscó una ruta de escape. Sin camisa y con los cortes en su cuerpo, Jeremy sabía que simplemente no podía ir caminando a casa. Se encendió una luz, no en la cabeza de Jeremy, sino dos calles más adelante. Era la luz de los faros del coche de un repartidor de pizzas. Ya sin preocuparse por el padre de su conquista, el joven lobo se dirigió al carro estacionado, rápidamente se subió al coche del repartidor y accionando el auto salió disparado de la calle. Por la emoción de su escape el joven lobo no se dio cuenta que el repartidor lo había visto llamar robar su auto y había llamado a la policía.
Jeremy se sentía culpable y abatido en el momento en que tomó el vehículo de esa manera pero su pellejo era más importante para él en ese momento, trataba de conducir lo más relajado para no llamar la atención, sin embargo para su desgracia pronto el sonido de una sirena se escuchaba a lo lejos y aproximándose, tal vez pudo haber pasado desapercibido... Pero el temor lo invadió rápidamente y acelero a fondo tratando de escapar de la patrulla que estaba ahora detrás suyo, no tomó mucho tiempo para que esta se encontrara lado a lado con el auto tomado por el lobo, aquel oficial trato de hacer entender al lobo que debía de bajar del vehículo, pero Jeremy no hizo caso y siguió adelante. El joven lobo sabía conducir bastante bien además de conocer la ciudad por completo por lo que optó por perder a la patrulla en una serie de callejones, gracias a esto Jeremy perdió la patrulla durante un buen rato lo cual lo hizo relajarse... Un grave error. Confiado en que estaba a salvo de los oficiales se detuvo en un callejón algo viejo y oculto a simple vista, pensó que podría llegar a casa y fingir que nada había pasado. Tan distraído estaba en sus pensamientos que no se dio cuenta de en qué momento el oficial que lo seguía se posiciono a lado suyo moviendo la cabeza de manera reprobatoria.
"Estás en problemas chico" dijo el oficial coyote
Jeremy trato de arrancar el vehículo nuevamente sin ningún éxito, preguntándose que había pasado volteo nuevamente a ver al oficial quien con una sonrisa burlona señaló un pequeño dispositivo pegado al capo del auto.
"Ese pequeño aparato desactiva el motor chico" explicó el oficial
Sin más remedio el joven lobo se entregó al oficial quien no perdió tiempo en esposarlo y sin ceremonias lo subió a su patrulla. Llegaron a la estación rápidamente. El oficial coyote salió, abrió una de las puertas y sacó a Jeremy de la patrulla y luego lo condujo adentro. Pasaron junto al mostrador de recepción y la recepcionista, una tortuga hizo un gesto de decepción mientras veía pasar al joven lobo. El oficial llevó a Jeremy a una celda y le quitó las esposas.
"Espera aquí" dijo el oficial
El joven lobo se quedó sentado en la celda y vio que del otro lado había un cuarto de pesas. El oficial regresó a la celda de espera con un teléfono móvil desechable.
"Tienes una llamada" dijo el oficial
Jeremy tomó el teléfono y marcó el número de teléfono de su casa. El teléfono sonó tres veces, siempre lo hizo, incluso si alguien estaba allí para los primeros dos, antes de que alguien del otro lado contestara. Pronto el padre de Jeremy contestó el teléfono y el joven lobo le informo la situación en la que se encontraba. Una vez terminó su llamada Jeremy colgó y devolvió el teléfono al oficial.
"¿Puedo ir a la sala de pesas?" preguntó Jeremy
"No veo por qué no" respondió el oficial
Jeremy estaba en la sala de pesas, usando pesas libres para ejercitar sus brazos, cuando el oficial entró.
"Tu padre está aquí chico ve a ducharte y límpiate bien, te estaré esperando justo aquí" dijo el oficial
Jeremy entró al cuarto de baño. Fue al último puesto en la fila de duchas y encendió el agua. Se desvistió rápidamente, colocándolos en el banco frente al puesto, junto a una toalla limpia, y se metió en la ducha. El agua estaba helada, pero considerando el calor que había en el ambiente y que se acababa de ejercitar fue algo agradable para el joven lobo. En un estante de porcelana colocado en la pared opuesta al cabezal de la ducha había una pastilla de jabón pre empaquetada. Él lo agarró y arrancó la envoltura. Comenzó a enjabonarse y limpiarse el sudor, al mismo tiempo lavándose los cortes en su cuerpo. Una vez que terminó, apagó el agua y se acercó al estante para agarrar la toalla. Se secó, luego se vistió. Salió del cuarto de baño y de manera pesada y lenta Jeremy se acercó hacia donde el oficial le indico, del otro lado de una reja estaba su padre quien lo miraba de manera desaprobatoria, con sus ojos azules que no mostraban emoción alguna.
"Señor puedo explicarlo…" dijo Jeremy
"No quiero oírlo soldado, nos vamos" dijo el padre de Jeremy
Con eso el oficial dejó a Jeremy en libertad y bajo la custodia de su padre, pronto padre e hijo se encontraban juntos rumbo a casa, el ambiente era tan tenso que podría cortarse con un cuchillo fácilmente, la mirada del padre se centró por un momento en su hijo y regresó al camino rápidamente.
"Deberías estar avergonzado hijo, puedo tolerar que andes acostándote con cualquiera, pero robar un auto, ¿En que estabas pensando?" preguntó su padre
"En no morir en las garras de un león furioso" respondió Jeremy
"Seguramente el león era el padre de Megan, ¿No es así?" dijo el padre de Jeremy
"Así es señor" respondió Jeremy
El viejo lobo suspiro cansado por la discusión y miró a su hijo a los ojos, sabía que Jeremy no quería ser un militar como él, pero debido a su comportamiento ya no le quedaba más opción, debía de enderezar a Jeremy por su propio bien.
"Hijo sé que no quieres seguir mis pasos, pero no me dejas otra opción, a partir del 1 de julio irás a la academia de la federación" dijo el padre de Jeremy
"¡No es justo señor!" se quejó Jeremy
"En realidad lo es, ¿Tienes alguna idea de lo estúpido que fue de tu parte? Te pillaron teniendo sexo con una chica cuyo padre te dijo que te alejaras, para empeorar las cosas se te ocurrió robar un carro, la vida no es un juego hijo, iras a la academia y punto" dijo el padre de Jeremy
Jeremy sabía que su padre tenía razón, pero no quería aceptarlo por orgullo así que un silencio incomodo se formó nuevamente hasta llegar a casa, en cuanto llegaron la madre del joven lobo abrazo a su hijo por preocupación, después de ver que estaba bien lo empezó a regañar por su conducta, por su parte el lobo mayor le explicó a su esposa lo que pasaría, muy a su pesar ella estuvo de acuerdo con la decisión. Jeremy subió a su habitación y miro por la ventana, sabía bien que había tipos rudos en la academia, por lo que si iba a sobrevivir, no solo sobrevivir, sino sobresalir, él tenía que ser más rudo que ellos. Para cuando se fue a la cama había tomado una decisión, no importaba el tiempo que estuviera allí, haría lo de siempre había hecho, tomar cuanto pudiera, tan a menudo como pudiera y devolver solo lo que quisiera. Y si alguna vez se le presentaba la oportunidad de escapar, no dudaría en tomarla y que el señor proteja a quien se le atraviese en el camino.
Al día siguiente, antes de que tan siquiera surgiera el sol el general Carter ya se encontraba despierto y listo para su partida, alerta de cualquier movimiento o ruido fuera de lugar en su hogar puesto que era consciente de que su hijo era capaz de escapar de él sin problemas en el caso de que se descuidara de este, un ruido más que esperado a sus espaldas lo saco un poco de su concentración, obligándolo a voltear su rostro al origen de este.
"Sabes que esta es lo mejor para el… " dijo de manera tranquila aunque angustiada el padre de Jeremy
"Lo sé, pero debes entender que es mi hijo después de todo" respondió tristemente una loba mientras se sentaba en su cama
"No quiero que el termine mal amor, no podría perdonármelo "respondió el padre de Jeremy mientras desviaba su mirada de su pareja "Dentro de la academia tengo a viejos y más recientes amigos, les pedí que lo cuidaran sin propasarse"
"¿Propasarse?" cuestiono preocupada su esposa
"Ya sabes, retarlo, humillarlo o hacerle bromas pesadas, aunque eso no es garantía de que no pase algo así" respondió de manera tranquila el viejo lobo, aliviado de que su esposa no haya tenido problemas en creerle "Aunque, por el momento lo mejor que puedo hacer es que Jeremy se haga cargo de lo que provoco"
"Entiendo amor, solo asegúrate de que no sean muy duros con el" dijo la madre de Jeremy
"Eso espero amor" respondió tranquilo el padre de Jeremy mientras se levantaba de su asiento "Es hora de que lo levante, pronto tendremos que irnos"
"Entiendo, en ese caso iré preparando su desayuno" dijo la loba mientras se levantaba de su cama
"No tienes que hacer esto, comeremos algo en el camino" le dijo algo intranquilo el lobo mientras abría la puerta de su recamara
"Nada de eso, quieran o no se irán con el estómago lleno" respondió la loba dirigiéndose a su esposo
"Pero amor… "trato de excusarse el padre de Jeremy
"Nada de peros, ve a levantar a Jeremy y bajan a desayunar, puede que sea la última vez que lo vea en mucho tiempo… por favor, hazlo amor" le dijo en una súplica la loba a su esposo
"Está bien amor, lo haré respondió el padre de Jeremy, besando la mejilla de su esposa con ternura
Después de lo ocurrido el padre de Jeremy se dirigió a la habitación de su hijo, él sabía que era algo tarde y se había distraído de él por un buen rato por lo que con prisa abrió la puerta de su hijo, encontrando la cama totalmente des tendida, esto preocupo bastante al viejo lobo hasta que escucho claramente como el inodoro era desocupado, revelando a Jeremy quien ya se encontraba listo para retirarse.
"Lo siento, ¿llevas rato esperándome?" pregunto Jeremy de manera relajada mientras tomaba sus cosas
"No mucho realmente, será mejor que bajemos de una vez, sino tu madre se enojara" respondió su padre mientras se dirigía a la cocina
"Creí que nos dirigiríamos inmediatamente hacia la academi" dijo confundido Jeremy
"Eso se lo puedes agradecer a tu madre, no seas un idiota con ella, realmente te extrañara" le respondió su padre
"¿Y tu?..."preguntó Jeremy, deteniendo al lobo adulto en la puerta "¿También me extrañaras?"
A pesar de la pregunta de Jeremy su padre no volteo a verlo, solo se mantuvo un corto periodo de silencio entre ambos, la tensión era bastante y ambos lo sabían, sin embargo y en contra de lo que Jeremy podría pensar, su padre rompió el silencio, aunque, de la misma manera, sin voltear en lo más mínimo.
"Eso ni yo mismo lo sé, por ahora solo piensa en que esta será tu mejor comida en un buen tiempo" dijo el padre de Jeremy siguiendo su camino
"… perdón… " dijo Jeremy casi en un susurro imperceptible, incluso tan bajo que su padre no logro escucharlo con claridad
Por un momento Jeremy se sintió devastado, sabía que en varias ocasiones había hecho enfadar a su padre, sin embargo, sabía que esta vez era diferente, puesto que la indiferencia de su padre era totalmente inusual, doliéndole profundamente pues sabía que esta vez sí que lo había arruinado, esta vez no era enojo por parte de su padre, sino algo más amargo, la decepción. Esta nueva espina clavada en el interior de Jeremy era realmente dolorosa por lo que tardo un rato en bajar con sus padres, al encontrarlo pudo ver a su madre sirviéndole el desayuno a su padre, sin embargo, él lo sabía, también había dañado a su madre por lo que tomo lugar en silencio, esperando no molestar mas a sus padres
"¿Tienes hambre Jeremy?" pregunto su madre, intentando tener el mismo tono de voz de siempre
"Si madre, gracias" respondió Jeremy apenado
Sin más, la madre de Jeremy le sirvió una buena porción de huevos con tocino y frijoles refritos como le gustaban a su familia, sin embargo, Jeremy sabía que esa comida estaba cargada con el sentimiento de su madre, no era molestia o enojo, era más bien la angustia y dolor que sentía por lo que estaba por pasar, una decisión inevitable.
"Lo siento…" Soltó Jeremy de repente, dejando a sus padres confundidos por un instante "Sé que soy el peor hijo, así que haré lo que sea necesario, pero, por favor, perdónenme…"
Ante las palabras de Jeremy sus padres no supieron que hacer, aunque su padre solo siguió comiendo tratando de ignorar sus palabras, mientras que, por su parte, su madre simplemente lagrimeo desviando la mirada de su hijo.
"… Entiendo, entonces los haré sentirse orgullosos, eso lo juro, no regresare a esta casa como un imbécil de nuevo, lo juro mamá" dijo Jeremy y siguió comiendo, con el sepulcral silencio de sus padres clavándose en su espalda, entendiendo la carga de culpa y compromiso que ahora tenía que cargar consigo
Al momento de terminar su desayuno, tanto Jeremy como su padre se retiraron de su hogar, aunque, para dolor del lobo, su madre prefirió solo despedirse rápidamente, aunque ese no sería el mayor problema para el lobo en esos momentos, poco después de que tanto Jeremy como su padre empezaran su camino, hicieron una parada en un lugar más que conocido para el joven lobo.
"¿Que hacemos aquí? "cuestiono confundido Jeremy
"Tú mismo lo dijiste, no quieres regresar a casa como un imbécil, y el más imbécil de los imbéciles no inicia una reformación sin resolver todos sus pendientes" contesto su padre seriamente viéndolo a los ojos
"Entiendo" respondió Jeremy mientras bajaba del vehículo
"Espera un momento… toma esto" le dijo su padre mientras le entregaba un sobre a Jeremy "eso compensara tu idiotez, pero no te lo estoy regalando, tendrás que devolverme esto más adelante"
"Entiendo, gracias padre" respondió Jeremy mientras se acercaba a la entrada
Con cada paso que daba el corazón de Jeremy se aceleraba más, señal de su claro nerviosismo, sin embargo, eso no le impidió tocar el timbre de la residencia, escuchando una voz amenazantemente conocida por el joven lobo, al momento de abrirse la puerta, Jeremy dio unos cuantos pasos atrás, viendo delante suyo a un gran león que no tardo nada en reconocerlo, mostrando sus colmillos al poco tiempo, Jeremy tuvo que apartarse rápidamente puesto que el gran león no tardo nada en intentar atacarlo con sus afiladas garras ignorando cualquier intento del joven lobo de calmarlo, aunque esto no represento gran problema a Jeremy, quien con suma facilidad lograba esquivarlo gracias al espacio amplio del jardín en el que se encontraban, sin embargo, antes de darse cuenta Jeremy resbalo por un tubo de riego en suelo, lo cual lo dejo desprotegido ante el golpe del león, aunque, para sorpresa de Jeremy y el felino, una mano había logrado evitar el golpe, al voltear ambos a el dueño de esta se toparon con los ojos inexpresivos del padre de Jeremy quien poco después soltó la muñeca del león.
"Disculpe el atrevimiento tan irritante de mi hijo, pero antes debería de escucharlo" dijo el padre de Jeremy de forma calmada y tranquila, aunque la frialdad con la que hablaba y su expresión seria en su mirada fue más que suficiente para que una espina se clavara en el sentido de peligro del león quien se relajó un poco en señal de que tomaría en cuenta el comentario del viejo lobo
#Entonces tiene dos minutos para explicarse # respondió el viejo león mientras se cruzaba de brazos, mirando con ira a Jeremy
"… Escuche, yo… realmente lamento lo de anoche, sé que no tengo excusas con lo que hice, sin embargo, creo que lo mejor es enmendar los daños que pude hacerle causado, sé que lo que hice fue una gran ofensa a su persona, pero, al menos con esto espero poder enmendar los daños materiales" dijo Jeremy mientras le extendía el sobre al león quien lo tomo algo más calmado "Espero poder algún día llevarme bien con usted y que no haya rencores, aunque por el momento eso tendrá que esperar, tendré que irme a una academia militar por mi conducta reprobatoria, así que espero que cuando salga, no haya más rencores"
Tras escuchar las palabras de Jeremy el gran león se relajó, mirando a Jeremy con algo de comprensión para posteriormente poner una mano en su hombro y mirándolo directamente a los ojos.
"Esto no es por mí, yo podre perdonarte, pero lo que hiciste fue ensuciar el honor de mi familia, no, más bien el de mi hija y eso es imperdonable, no puedo dejarte ir solo así de mi hogar" dijo el león y sorpresivamente para los dos lobo el gran león dio un potente puñetazo al estómago de Jeremy, dejándolo tirado en el suelo sin aire en sus pulmones mientras el león se marchaba rumbo a su casa "Con eso espero que entiendas mi punto de vista paterno, realmente espero no verte más en mi vida, aunque si lo hago, espero que sea cuando te hayas convertido en una persona de bien, sé que hacia donde te diriges habrá peores cosas de las que yo te hubiera hecho, así que dejare las cosas hasta aquí, suerte con tu vida"
Mientras el león decía esto se dirigía a su casa, pero, nunca volteo a ver a Jeremy o a su padre en ningún momento hasta perderse en el momento que cerro su puerta, por su parte el padre de Jeremy se sentía realmente molesto, aunque compresivo a la decisión del león por lo que simplemente se retiró a su vehículo, esperando a Jeremy para dirigirse a su destino.
!Te fue mejor de lo que esperaba" dijo el padre de Jeremy mientras su hijo tomaba asiento
"¿Tú crees?"le cuestiono el joven lobo
"Claro que si, si yo estuviera en su lugar, no te habría dejado ir sin al menos romperte un diente o un hueso" respondió el viejo lobo mientras retomaba su rumbo
"… En fin, ¿donde queda esa academia militar?"cuestiono Jeremy
"Podría decirse que tengo que separarme de ti pronto "respondió el lobo mayor
"¡¿Entonces deberé de tomar un avión para llegar?!"cuestiono Jeremy alarmado
"No precisamente" respondió su padre
"Entonces no entiendo" dijo Jeremy confundido
"Veras, tu academia no esta en este país, ni en este continente, a decir verdad, ni siquiera en este planeta" respondió finalmente el viejo lobo mientras conducía
"¡No puede ser!, entonces yo tengo que ir a… -Jeremy no termino de hablar cuando vio algo totalmente inesperado
Al momento de arribar a su destino Jeremy entendió todo, un gran escáner los registro mientras que el vehículo de su padre era detectado y supervisado de no tener ningún tipo de arma o bomba en su interior gracias a varios sensores y maquinas que se encargaron de escanear de arriba abajo por completo el transporte de los lobos, al determinar que no tenían nada peligroso y confirmar la identidad del padre de Jeremy una joven coneja los invito a salir del automóvil y entrar al complejo, para sorpresa de Jeremy al voltear a ver qué pasaba con su transporte se dio cuenta de cómo un mecanismo robótico se encargaba de moverlo a otro lugar, desplazándolo desde el mismo suelo que lo retenía desde la llantas para perderse de su vista.
"General Carter, es un gusto tenerlo aquí, ¿lo esperan?" pregunto la coneja mientras apuntaba unas cosas dentro de una tableta de cristal
"Realmente a mí no, es a mi hijo Jeremy" respondió de una manera seria pero formal el viejo lobo
"Ya veo, él debe de tomar el transbordador por el andén 47-c, o al menos eso dice aquí" respondió tranquila la coneja
"Bien, ¿cuanto tiempo le tomara llegar a su destino?" pregunto el lobo mayor
"24 horas en el peor de los casos General"respondió sin titubeos la coneja
"Excelente, acompañare a mi hijo a su anden" respondió el padre de Jeremy tomándolo por el hombro
"Que tengan un buen día" dijo la coneja retirándose
"Vaya… no esperaba que me quisieran tan lejos de ustedes" dijo Jeremy tratando de aliviar el ambiente
"Esta fue la ultima opción hijo, no quería llegar a este extremo" respondió su padre sin mirarlo a los ojos
"Lo entiendo, pero eso no hace que duela menos" Dijo Jeremy mientras caminaba "Por cierto, ¿qué va a pasar con mis cosas? Las deje todas en el auto
"No tienes que preocuparte por eso, ya deben de estar dentro de tu transporte" respondió con calma el lobo mayor
"Ya veo" dijo Jeremy mientras llegaban a su destino "¿Ire solo hasta haya?
"No seas ridículo Jeremy, ¿tienes idea de cuánto cuesta esto para el gobierno?, tuve suerte de que me dejaran inscribirte de último momento, sino tendríamos que haber esperado otros seis meses en lo que preparaban el próximo transbordador, tuve que cobrar unos favores aquí y haya, pero, el punto es que estas aquí hijo" respondió el viejo lobo
"Ahora lo entiendo, voy a extrañarlos" dijo Jeremy sin ver a su padre
"Estoy seguro de que tu madre también te extrañara" respondió su padre dejando a Jeremy dolido
"Creo que es hora de irme, espero no ser el último y que solo me estén esperando" dijo Jeremy intentando apartar todos esos sentimientos negativos de el
"Eso espero yo también Jeremy, cumple tu promesa y haz que nos sintamos orgullosos de ti, no por nada eres un Carter" respondió su padre con una sonrisa mientras veía a Jeremy subir a el transbordador
"… Adiós papá…" dijo Jeremy entrando a su transporte, sin imaginar todo a lo que tendría que enfrentarse puesto que esas últimas palabras de su padre cobrarían sentido más adelante y más pronto de lo que Jeremy podría esperar
"Jeremy, ¿Si tenemos un hijo, como quieres que se llame?" preguntó Megan
Antes que Jeremy pudiera responder, una luz se encendió en el cobertizo. La cabeza de Jeremy giró rápidamente y vio a un corpulento león de pie en la entrada. El león estaba sorprendido por la escena enfrente de él, pero rápidamente superó su estado gruñendo fuerte. Para él joven lupino había duda en el significado de ese gruñido; era momento de irse. Pensando muy rápido, Jeremy corrió hacia la ventana y comenzó a planear su escape, moviéndose a gran velocidad. Vio su camiseta colgando de la cortadora de césped, pero no tenía tiempo de para recogerla, debía huir. Con la entrada bloqueada por el corpulento felino, el joven lobo tomó una decisión rápida, saltó hacia atrás golpeando la ventana del cobertizo rompiéndola con su cuerpo. Al caer al suelo Jeremy notó que el cristal de la ventana lo había cortado en varios lugares, pero no se detuvo mucho, sabía que el león pronto iría tras él, el joven lobo buscó una ruta de escape. Sin camisa y con los cortes en su cuerpo, Jeremy sabía que simplemente no podía ir caminando a casa. Se encendió una luz, no en la cabeza de Jeremy, sino dos calles más adelante. Era la luz de los faros del coche de un repartidor de pizzas. Ya sin preocuparse por el padre de su conquista, el joven lobo se dirigió al carro estacionado, rápidamente se subió al coche del repartidor y accionando el auto salió disparado de la calle. Por la emoción de su escape el joven lobo no se dio cuenta que el repartidor lo había visto llamar robar su auto y había llamado a la policía.
Jeremy se sentía culpable y abatido en el momento en que tomó el vehículo de esa manera pero su pellejo era más importante para él en ese momento, trataba de conducir lo más relajado para no llamar la atención, sin embargo para su desgracia pronto el sonido de una sirena se escuchaba a lo lejos y aproximándose, tal vez pudo haber pasado desapercibido... Pero el temor lo invadió rápidamente y acelero a fondo tratando de escapar de la patrulla que estaba ahora detrás suyo, no tomó mucho tiempo para que esta se encontrara lado a lado con el auto tomado por el lobo, aquel oficial trato de hacer entender al lobo que debía de bajar del vehículo, pero Jeremy no hizo caso y siguió adelante. El joven lobo sabía conducir bastante bien además de conocer la ciudad por completo por lo que optó por perder a la patrulla en una serie de callejones, gracias a esto Jeremy perdió la patrulla durante un buen rato lo cual lo hizo relajarse... Un grave error. Confiado en que estaba a salvo de los oficiales se detuvo en un callejón algo viejo y oculto a simple vista, pensó que podría llegar a casa y fingir que nada había pasado. Tan distraído estaba en sus pensamientos que no se dio cuenta de en qué momento el oficial que lo seguía se posiciono a lado suyo moviendo la cabeza de manera reprobatoria.
"Estás en problemas chico" dijo el oficial coyote
Jeremy trato de arrancar el vehículo nuevamente sin ningún éxito, preguntándose que había pasado volteo nuevamente a ver al oficial quien con una sonrisa burlona señaló un pequeño dispositivo pegado al capo del auto.
"Ese pequeño aparato desactiva el motor chico" explicó el oficial
Sin más remedio el joven lobo se entregó al oficial quien no perdió tiempo en esposarlo y sin ceremonias lo subió a su patrulla. Llegaron a la estación rápidamente. El oficial coyote salió, abrió una de las puertas y sacó a Jeremy de la patrulla y luego lo condujo adentro. Pasaron junto al mostrador de recepción y la recepcionista, una tortuga hizo un gesto de decepción mientras veía pasar al joven lobo. El oficial llevó a Jeremy a una celda y le quitó las esposas.
"Espera aquí" dijo el oficial
El joven lobo se quedó sentado en la celda y vio que del otro lado había un cuarto de pesas. El oficial regresó a la celda de espera con un teléfono móvil desechable.
"Tienes una llamada" dijo el oficial
Jeremy tomó el teléfono y marcó el número de teléfono de su casa. El teléfono sonó tres veces, siempre lo hizo, incluso si alguien estaba allí para los primeros dos, antes de que alguien del otro lado contestara. Pronto el padre de Jeremy contestó el teléfono y el joven lobo le informo la situación en la que se encontraba. Una vez terminó su llamada Jeremy colgó y devolvió el teléfono al oficial.
"¿Puedo ir a la sala de pesas?" preguntó Jeremy
"No veo por qué no" respondió el oficial
Jeremy estaba en la sala de pesas, usando pesas libres para ejercitar sus brazos, cuando el oficial entró.
"Tu padre está aquí chico ve a ducharte y límpiate bien, te estaré esperando justo aquí" dijo el oficial
Jeremy entró al cuarto de baño. Fue al último puesto en la fila de duchas y encendió el agua. Se desvistió rápidamente, colocándolos en el banco frente al puesto, junto a una toalla limpia, y se metió en la ducha. El agua estaba helada, pero considerando el calor que había en el ambiente y que se acababa de ejercitar fue algo agradable para el joven lobo. En un estante de porcelana colocado en la pared opuesta al cabezal de la ducha había una pastilla de jabón pre empaquetada. Él lo agarró y arrancó la envoltura. Comenzó a enjabonarse y limpiarse el sudor, al mismo tiempo lavándose los cortes en su cuerpo. Una vez que terminó, apagó el agua y se acercó al estante para agarrar la toalla. Se secó, luego se vistió. Salió del cuarto de baño y de manera pesada y lenta Jeremy se acercó hacia donde el oficial le indico, del otro lado de una reja estaba su padre quien lo miraba de manera desaprobatoria, con sus ojos azules que no mostraban emoción alguna.
"Señor puedo explicarlo…" dijo Jeremy
"No quiero oírlo soldado, nos vamos" dijo el padre de Jeremy
Con eso el oficial dejó a Jeremy en libertad y bajo la custodia de su padre, pronto padre e hijo se encontraban juntos rumbo a casa, el ambiente era tan tenso que podría cortarse con un cuchillo fácilmente, la mirada del padre se centró por un momento en su hijo y regresó al camino rápidamente.
"Deberías estar avergonzado hijo, puedo tolerar que andes acostándote con cualquiera, pero robar un auto, ¿En que estabas pensando?" preguntó su padre
"En no morir en las garras de un león furioso" respondió Jeremy
"Seguramente el león era el padre de Megan, ¿No es así?" dijo el padre de Jeremy
"Así es señor" respondió Jeremy
El viejo lobo suspiro cansado por la discusión y miró a su hijo a los ojos, sabía que Jeremy no quería ser un militar como él, pero debido a su comportamiento ya no le quedaba más opción, debía de enderezar a Jeremy por su propio bien.
"Hijo sé que no quieres seguir mis pasos, pero no me dejas otra opción, a partir del 1 de julio irás a la academia de la federación" dijo el padre de Jeremy
"¡No es justo señor!" se quejó Jeremy
"En realidad lo es, ¿Tienes alguna idea de lo estúpido que fue de tu parte? Te pillaron teniendo sexo con una chica cuyo padre te dijo que te alejaras, para empeorar las cosas se te ocurrió robar un carro, la vida no es un juego hijo, iras a la academia y punto" dijo el padre de Jeremy
Jeremy sabía que su padre tenía razón, pero no quería aceptarlo por orgullo así que un silencio incomodo se formó nuevamente hasta llegar a casa, en cuanto llegaron la madre del joven lobo abrazo a su hijo por preocupación, después de ver que estaba bien lo empezó a regañar por su conducta, por su parte el lobo mayor le explicó a su esposa lo que pasaría, muy a su pesar ella estuvo de acuerdo con la decisión. Jeremy subió a su habitación y miro por la ventana, sabía bien que había tipos rudos en la academia, por lo que si iba a sobrevivir, no solo sobrevivir, sino sobresalir, él tenía que ser más rudo que ellos. Para cuando se fue a la cama había tomado una decisión, no importaba el tiempo que estuviera allí, haría lo de siempre había hecho, tomar cuanto pudiera, tan a menudo como pudiera y devolver solo lo que quisiera. Y si alguna vez se le presentaba la oportunidad de escapar, no dudaría en tomarla y que el señor proteja a quien se le atraviese en el camino.
Al día siguiente, antes de que tan siquiera surgiera el sol el general Carter ya se encontraba despierto y listo para su partida, alerta de cualquier movimiento o ruido fuera de lugar en su hogar puesto que era consciente de que su hijo era capaz de escapar de él sin problemas en el caso de que se descuidara de este, un ruido más que esperado a sus espaldas lo saco un poco de su concentración, obligándolo a voltear su rostro al origen de este.
"Sabes que esta es lo mejor para el… " dijo de manera tranquila aunque angustiada el padre de Jeremy
"Lo sé, pero debes entender que es mi hijo después de todo" respondió tristemente una loba mientras se sentaba en su cama
"No quiero que el termine mal amor, no podría perdonármelo "respondió el padre de Jeremy mientras desviaba su mirada de su pareja "Dentro de la academia tengo a viejos y más recientes amigos, les pedí que lo cuidaran sin propasarse"
"¿Propasarse?" cuestiono preocupada su esposa
"Ya sabes, retarlo, humillarlo o hacerle bromas pesadas, aunque eso no es garantía de que no pase algo así" respondió de manera tranquila el viejo lobo, aliviado de que su esposa no haya tenido problemas en creerle "Aunque, por el momento lo mejor que puedo hacer es que Jeremy se haga cargo de lo que provoco"
"Entiendo amor, solo asegúrate de que no sean muy duros con el" dijo la madre de Jeremy
"Eso espero amor" respondió tranquilo el padre de Jeremy mientras se levantaba de su asiento "Es hora de que lo levante, pronto tendremos que irnos"
"Entiendo, en ese caso iré preparando su desayuno" dijo la loba mientras se levantaba de su cama
"No tienes que hacer esto, comeremos algo en el camino" le dijo algo intranquilo el lobo mientras abría la puerta de su recamara
"Nada de eso, quieran o no se irán con el estómago lleno" respondió la loba dirigiéndose a su esposo
"Pero amor… "trato de excusarse el padre de Jeremy
"Nada de peros, ve a levantar a Jeremy y bajan a desayunar, puede que sea la última vez que lo vea en mucho tiempo… por favor, hazlo amor" le dijo en una súplica la loba a su esposo
"Está bien amor, lo haré respondió el padre de Jeremy, besando la mejilla de su esposa con ternura
Después de lo ocurrido el padre de Jeremy se dirigió a la habitación de su hijo, él sabía que era algo tarde y se había distraído de él por un buen rato por lo que con prisa abrió la puerta de su hijo, encontrando la cama totalmente des tendida, esto preocupo bastante al viejo lobo hasta que escucho claramente como el inodoro era desocupado, revelando a Jeremy quien ya se encontraba listo para retirarse.
"Lo siento, ¿llevas rato esperándome?" pregunto Jeremy de manera relajada mientras tomaba sus cosas
"No mucho realmente, será mejor que bajemos de una vez, sino tu madre se enojara" respondió su padre mientras se dirigía a la cocina
"Creí que nos dirigiríamos inmediatamente hacia la academi" dijo confundido Jeremy
"Eso se lo puedes agradecer a tu madre, no seas un idiota con ella, realmente te extrañara" le respondió su padre
"¿Y tu?..."preguntó Jeremy, deteniendo al lobo adulto en la puerta "¿También me extrañaras?"
A pesar de la pregunta de Jeremy su padre no volteo a verlo, solo se mantuvo un corto periodo de silencio entre ambos, la tensión era bastante y ambos lo sabían, sin embargo y en contra de lo que Jeremy podría pensar, su padre rompió el silencio, aunque, de la misma manera, sin voltear en lo más mínimo.
"Eso ni yo mismo lo sé, por ahora solo piensa en que esta será tu mejor comida en un buen tiempo" dijo el padre de Jeremy siguiendo su camino
"… perdón… " dijo Jeremy casi en un susurro imperceptible, incluso tan bajo que su padre no logro escucharlo con claridad
Por un momento Jeremy se sintió devastado, sabía que en varias ocasiones había hecho enfadar a su padre, sin embargo, sabía que esta vez era diferente, puesto que la indiferencia de su padre era totalmente inusual, doliéndole profundamente pues sabía que esta vez sí que lo había arruinado, esta vez no era enojo por parte de su padre, sino algo más amargo, la decepción. Esta nueva espina clavada en el interior de Jeremy era realmente dolorosa por lo que tardo un rato en bajar con sus padres, al encontrarlo pudo ver a su madre sirviéndole el desayuno a su padre, sin embargo, él lo sabía, también había dañado a su madre por lo que tomo lugar en silencio, esperando no molestar mas a sus padres
"¿Tienes hambre Jeremy?" pregunto su madre, intentando tener el mismo tono de voz de siempre
"Si madre, gracias" respondió Jeremy apenado
Sin más, la madre de Jeremy le sirvió una buena porción de huevos con tocino y frijoles refritos como le gustaban a su familia, sin embargo, Jeremy sabía que esa comida estaba cargada con el sentimiento de su madre, no era molestia o enojo, era más bien la angustia y dolor que sentía por lo que estaba por pasar, una decisión inevitable.
"Lo siento…" Soltó Jeremy de repente, dejando a sus padres confundidos por un instante "Sé que soy el peor hijo, así que haré lo que sea necesario, pero, por favor, perdónenme…"
Ante las palabras de Jeremy sus padres no supieron que hacer, aunque su padre solo siguió comiendo tratando de ignorar sus palabras, mientras que, por su parte, su madre simplemente lagrimeo desviando la mirada de su hijo.
"… Entiendo, entonces los haré sentirse orgullosos, eso lo juro, no regresare a esta casa como un imbécil de nuevo, lo juro mamá" dijo Jeremy y siguió comiendo, con el sepulcral silencio de sus padres clavándose en su espalda, entendiendo la carga de culpa y compromiso que ahora tenía que cargar consigo
Al momento de terminar su desayuno, tanto Jeremy como su padre se retiraron de su hogar, aunque, para dolor del lobo, su madre prefirió solo despedirse rápidamente, aunque ese no sería el mayor problema para el lobo en esos momentos, poco después de que tanto Jeremy como su padre empezaran su camino, hicieron una parada en un lugar más que conocido para el joven lobo.
"¿Que hacemos aquí? "cuestiono confundido Jeremy
"Tú mismo lo dijiste, no quieres regresar a casa como un imbécil, y el más imbécil de los imbéciles no inicia una reformación sin resolver todos sus pendientes" contesto su padre seriamente viéndolo a los ojos
"Entiendo" respondió Jeremy mientras bajaba del vehículo
"Espera un momento… toma esto" le dijo su padre mientras le entregaba un sobre a Jeremy "eso compensara tu idiotez, pero no te lo estoy regalando, tendrás que devolverme esto más adelante"
"Entiendo, gracias padre" respondió Jeremy mientras se acercaba a la entrada
Con cada paso que daba el corazón de Jeremy se aceleraba más, señal de su claro nerviosismo, sin embargo, eso no le impidió tocar el timbre de la residencia, escuchando una voz amenazantemente conocida por el joven lobo, al momento de abrirse la puerta, Jeremy dio unos cuantos pasos atrás, viendo delante suyo a un gran león que no tardo nada en reconocerlo, mostrando sus colmillos al poco tiempo, Jeremy tuvo que apartarse rápidamente puesto que el gran león no tardo nada en intentar atacarlo con sus afiladas garras ignorando cualquier intento del joven lobo de calmarlo, aunque esto no represento gran problema a Jeremy, quien con suma facilidad lograba esquivarlo gracias al espacio amplio del jardín en el que se encontraban, sin embargo, antes de darse cuenta Jeremy resbalo por un tubo de riego en suelo, lo cual lo dejo desprotegido ante el golpe del león, aunque, para sorpresa de Jeremy y el felino, una mano había logrado evitar el golpe, al voltear ambos a el dueño de esta se toparon con los ojos inexpresivos del padre de Jeremy quien poco después soltó la muñeca del león.
"Disculpe el atrevimiento tan irritante de mi hijo, pero antes debería de escucharlo" dijo el padre de Jeremy de forma calmada y tranquila, aunque la frialdad con la que hablaba y su expresión seria en su mirada fue más que suficiente para que una espina se clavara en el sentido de peligro del león quien se relajó un poco en señal de que tomaría en cuenta el comentario del viejo lobo
#Entonces tiene dos minutos para explicarse # respondió el viejo león mientras se cruzaba de brazos, mirando con ira a Jeremy
"… Escuche, yo… realmente lamento lo de anoche, sé que no tengo excusas con lo que hice, sin embargo, creo que lo mejor es enmendar los daños que pude hacerle causado, sé que lo que hice fue una gran ofensa a su persona, pero, al menos con esto espero poder enmendar los daños materiales" dijo Jeremy mientras le extendía el sobre al león quien lo tomo algo más calmado "Espero poder algún día llevarme bien con usted y que no haya rencores, aunque por el momento eso tendrá que esperar, tendré que irme a una academia militar por mi conducta reprobatoria, así que espero que cuando salga, no haya más rencores"
Tras escuchar las palabras de Jeremy el gran león se relajó, mirando a Jeremy con algo de comprensión para posteriormente poner una mano en su hombro y mirándolo directamente a los ojos.
"Esto no es por mí, yo podre perdonarte, pero lo que hiciste fue ensuciar el honor de mi familia, no, más bien el de mi hija y eso es imperdonable, no puedo dejarte ir solo así de mi hogar" dijo el león y sorpresivamente para los dos lobo el gran león dio un potente puñetazo al estómago de Jeremy, dejándolo tirado en el suelo sin aire en sus pulmones mientras el león se marchaba rumbo a su casa "Con eso espero que entiendas mi punto de vista paterno, realmente espero no verte más en mi vida, aunque si lo hago, espero que sea cuando te hayas convertido en una persona de bien, sé que hacia donde te diriges habrá peores cosas de las que yo te hubiera hecho, así que dejare las cosas hasta aquí, suerte con tu vida"
Mientras el león decía esto se dirigía a su casa, pero, nunca volteo a ver a Jeremy o a su padre en ningún momento hasta perderse en el momento que cerro su puerta, por su parte el padre de Jeremy se sentía realmente molesto, aunque compresivo a la decisión del león por lo que simplemente se retiró a su vehículo, esperando a Jeremy para dirigirse a su destino.
!Te fue mejor de lo que esperaba" dijo el padre de Jeremy mientras su hijo tomaba asiento
"¿Tú crees?"le cuestiono el joven lobo
"Claro que si, si yo estuviera en su lugar, no te habría dejado ir sin al menos romperte un diente o un hueso" respondió el viejo lobo mientras retomaba su rumbo
"… En fin, ¿donde queda esa academia militar?"cuestiono Jeremy
"Podría decirse que tengo que separarme de ti pronto "respondió el lobo mayor
"¡¿Entonces deberé de tomar un avión para llegar?!"cuestiono Jeremy alarmado
"No precisamente" respondió su padre
"Entonces no entiendo" dijo Jeremy confundido
"Veras, tu academia no esta en este país, ni en este continente, a decir verdad, ni siquiera en este planeta" respondió finalmente el viejo lobo mientras conducía
"¡No puede ser!, entonces yo tengo que ir a… -Jeremy no termino de hablar cuando vio algo totalmente inesperado
Al momento de arribar a su destino Jeremy entendió todo, un gran escáner los registro mientras que el vehículo de su padre era detectado y supervisado de no tener ningún tipo de arma o bomba en su interior gracias a varios sensores y maquinas que se encargaron de escanear de arriba abajo por completo el transporte de los lobos, al determinar que no tenían nada peligroso y confirmar la identidad del padre de Jeremy una joven coneja los invito a salir del automóvil y entrar al complejo, para sorpresa de Jeremy al voltear a ver qué pasaba con su transporte se dio cuenta de cómo un mecanismo robótico se encargaba de moverlo a otro lugar, desplazándolo desde el mismo suelo que lo retenía desde la llantas para perderse de su vista.
"General Carter, es un gusto tenerlo aquí, ¿lo esperan?" pregunto la coneja mientras apuntaba unas cosas dentro de una tableta de cristal
"Realmente a mí no, es a mi hijo Jeremy" respondió de una manera seria pero formal el viejo lobo
"Ya veo, él debe de tomar el transbordador por el andén 47-c, o al menos eso dice aquí" respondió tranquila la coneja
"Bien, ¿cuanto tiempo le tomara llegar a su destino?" pregunto el lobo mayor
"24 horas en el peor de los casos General"respondió sin titubeos la coneja
"Excelente, acompañare a mi hijo a su anden" respondió el padre de Jeremy tomándolo por el hombro
"Que tengan un buen día" dijo la coneja retirándose
"Vaya… no esperaba que me quisieran tan lejos de ustedes" dijo Jeremy tratando de aliviar el ambiente
"Esta fue la ultima opción hijo, no quería llegar a este extremo" respondió su padre sin mirarlo a los ojos
"Lo entiendo, pero eso no hace que duela menos" Dijo Jeremy mientras caminaba "Por cierto, ¿qué va a pasar con mis cosas? Las deje todas en el auto
"No tienes que preocuparte por eso, ya deben de estar dentro de tu transporte" respondió con calma el lobo mayor
"Ya veo" dijo Jeremy mientras llegaban a su destino "¿Ire solo hasta haya?
"No seas ridículo Jeremy, ¿tienes idea de cuánto cuesta esto para el gobierno?, tuve suerte de que me dejaran inscribirte de último momento, sino tendríamos que haber esperado otros seis meses en lo que preparaban el próximo transbordador, tuve que cobrar unos favores aquí y haya, pero, el punto es que estas aquí hijo" respondió el viejo lobo
"Ahora lo entiendo, voy a extrañarlos" dijo Jeremy sin ver a su padre
"Estoy seguro de que tu madre también te extrañara" respondió su padre dejando a Jeremy dolido
"Creo que es hora de irme, espero no ser el último y que solo me estén esperando" dijo Jeremy intentando apartar todos esos sentimientos negativos de el
"Eso espero yo también Jeremy, cumple tu promesa y haz que nos sintamos orgullosos de ti, no por nada eres un Carter" respondió su padre con una sonrisa mientras veía a Jeremy subir a el transbordador
"… Adiós papá…" dijo Jeremy entrando a su transporte, sin imaginar todo a lo que tendría que enfrentarse puesto que esas últimas palabras de su padre cobrarían sentido más adelante y más pronto de lo que Jeremy podría esperar