Darknesswolf88
Dios Rey lobo
Buenos días, tardes o noches, aquí su amigo lobo trayendo de nuevo esta historia esperando que les guste, como siempre agradeciendo la ayuda del lomito
Gao
19-12-3018 (Fecha Estelar 286) Sistema Estelar Ausaril Planeta Edenia
Jeremy se encontraba agachado junto al resto de sus compañeros de equipo, podía sentir como su corazón latía con fuerza en su pecho. La multitud estaba sentada al borde de sus asientos, la anticipación los mataba. El sudor caía por su frente ya que los nervios le habían alcanzado por fin. Por algo el equipo del instituto Trenton era su mayor rival Trenton estaba arriba por 5 puntos, y quedaba poco tiempo en el reloj, el lobo sabía que habían pocas posibilidades de que se pudieran llevar la victoria, el equipo de Trenton sólo tenía que dejar correr el reloj y el partido se acabaría. Pero no había forma de que se diera por vencido, el juego aún seguía en marcha.
El quarterback del equipo de Trenton preparó la jugada, entonces justo cuando iba a lanzar el balón, Kyle un tigre siberiano, cargó contra él con un rugido que hizo temblar el estadio. Atravesó a los defensores de Trenton y golpeó con todas sus fuerzas al quarterback, haciendo que retrocediera al menos metro y medio. La acción del tigre liberó el balón de las manos del quarterback y ahora se encontraba volando en el aire. Los jugadores de ambos equipos parecieron congelarse y todo el estadio quedó en silencio por un momento. Jeremy estaba esperando justo un momento como este, por lo que saltó con todas sus fuerzas y tomó el balón , y el público estalló cuando el equipo defensivo se convirtió en el ofensivo y Jeremy empezó a correr hacia la zona de anotación. El equipo de Trenton trató de atacar al lobo para impedir que anotara, pero lupino evadió cada intentó y lanzó el balón con un aullido fuerte en señal de victoria.
“¡Y con ese touchdown el Instituto Arlington se lleva la victoria damas y caballeros! ¡Jeremy Carter lo ha hecho de nuevo!”
La voz del anunciador no era más que un zumbido dentro del casco del joven lobo, los sonidos de su jadeante y sudorosa respiración vibraban en la carcasa de aleación de plástico. Jeremy abrió los ojos débilmente, se enfrentó a las gradas llenas de fursonas vitoreando y gritando eufóricamente, sintiendo los terrones de césped fríos y ásperos bajo sus patas, sonrió, agitando una pata lentamente para provocar los gritos que consolidaban su récord. El lupino de 18 años había corrido más de sesenta yardas, hasta la zona de anotación para anotar el touchdown que les permitió ganar su tercer título consecutivo, por un punto; la final más reñida y agotadora de la temporada.
Se sentía entumecido, la sonrisa en su rostro se quedó allí mientras sus compañeros se amontonaron sobre él con abrazos y golpes en la espalda, mientras que los oponentes, miraban al lobo con tanta malicia que si fueran cuchillos atravesarían el pecho de Jeremy. Mientras el lobo era llevado fuera del campo por sus compañeros, escudriñó a la multitud en busca de alguna señal de su padre, pero sólo vio a las animadoras abrazándose y gritando estridentemente, y a los padres de sus compañero que habían venido a animar a sus hijos, pero ningún rastro de su padre. El grupo llevó al lobo hasta la banda lateral donde fueron detenidos por el Entrenador Harper.
"Buen trabajo Jeremy. Nos has hecho ganar el partido" dijo el oso polar
“Gracias entrenador” dijo Jeremy quitándose el casco y sonriendo de oreja a oreja
“Muy bien chicos, ¡A los vestidores!" indicó el entrenador Harper
El equipo gritó y vitoreó mientras empezaban a correr hacia los vestidores. Por su parte Jeremy se quitó el casco y se sentó en una banca, Kyle se sentó a su lado y envolvió su brazo alrededor de los hombros de su amigo.
"Esa fue una muy buena jugada. Tal vez deberíamos tenerte en el equipo ofensivo" dijo el tigre
“Yo no hubiera podido obtener la pelota si tu no hubieras derribado a su quarterback” dijo Jeremy
“Tal vez, pero si no la hubieras atrapado, entonces habríamos perdido” dijo Kyle
“Hubiera sido mejor si mi padre hubiera estado presente para verlo” comentó Jeremy gruñendo bajo de lo frustrado que se sentía “Me prometió que este partido no se lo iba a perder”
El tigre hizo una mueca, la urgencia de hacer una broma fue pisoteada por la mirada fulminante del lobo, una mirada que el tigre sabía que hacía temblar a los rivales. Suspiró, y se puso de pie, tratando de no mirar a su mejor amigo con lástima.
“Bueno...yo y algunos chicos planeamos ir a comer pizza, ¿Vienes?” preguntó Kyle
Jeremy negó con la cabeza, suspirando y miró con una leve sonrisa a su amigo, inclinándose hacia atrás con la cola moviéndose de un lado a otro con pereza. El agua aún goteaba de su pelaje, y se sacudió rigurosamente, haciendo de su pelaje un desastre.
"Está bien, nos vemos” dijo Kyle
“Claro amigo” dijo el lobo
El tigre se dirigió hacia los vestidores, dejando que Jeremy contemplara el campo vacío con una sensación de pertenencia.Las brillantes luces resplandecían sobre los bloques y rayas verdes y blancas, aterrorizando a la luna del cielo junto con las estrellas para dejar un fondo negro, una noche sólida para contrastar la luminiscencia. La hierba brillaba como un relámpago, una miniatura de paisaje que resplandecía de color esmeralda en la falta de luz de la tarde. Jeremy miró hacia abajo, haciendo una mueca al ver las manchas igualmente brillantes en todo su uniforme azul real, todos los colores en alto contraste con su pelaje color marrón, podía sentir sus músculos adoloridos, y no había otra palabra para definirlo que victoria. Pronto el calor de las luces y el sudor que recorría su cuerpo fue demasiado como para permanecer más tiempo disfrutando de su logro, por lo que se puso de pie y se dirigió a los vestidores.
Cuando entró fue recibido por la vista de su casillero abierto, gruño molesto y corrió hacia el, empezó a buscar en su interior con algo de miedo, no estaba, busco nuevamente sin mejor resultado, se preguntaba quién rayos podría estar haciendo algo como eso cuando la respuesta llegó a sus espaldas con el sonido más que familiar de su inhalador disparando una de sus cargas. Dejando caer al suelo su casco se dio la vuelta para confrontar al responsable, un Rottweiler vestido con el mismo uniforme que el lobo, quien le miraba con una sonrisa
“Hola Jeremy, realmente no te esperaba aquí tan pronto” dijo el can
“Cooper, tu perro infeliz, ¡¡¿Qué diablos estás haciendo?!!” gruñó Jeremy
“¿Me llamas perro sin más? Sabes bien que odio eso” dijo Cooper mientras presionaba el inhalador, disparando dos cargas más ante los ojos de Jeremy “Soy un Rottweiler y sabes bien que odio que me digas de ese modo”
“¡Me importa un carajo lo que digas! ¿Qué mierda se supone que estas haciendo con mis cosas?” Pregunto Jeremy gruñendo con ira
“¿Te preguntas qué hago? Yo debería preguntar eso, se supone que si entras al equipo es porque no padeces ninguna afección y puedes hacer deportes sin riesgo como lo digas las normas de competición, sin embargo, he notado como de vez en cuando, al terminar el partido usas este inhalador, no tiene ninguna etiqueta pero puedo suponer que es para algún mal pulmonar y lo has estado ocultando con esa sonrisa de mierda después de cada partido y cada práctica..” Respondió Cooper mirando al lobo de una manera sombría mientras apretaba el inhalador en sus manos “... ¿Tienes idea de la mierda que es eso?... Esforzarse constantemente para conseguir resultados, día tras día tras día sin nada de progreso, y cada vez que siento que estoy alcanzando mi meta… ¡¡¡Tu apareces y robas la atención de todos!!! He estado a tu puta sombra esperando que algo pase para poder mostrar mis habilidades, pero el jodido y perfecto Jeremy siempre hace algo que me hace retroceder cinco pasos ¡¡¡Tu simplemente estorbas siempre que es mi oportunidad, me la robas de las manos!!!, pero, esta vez te atrape, me importa un carajo lo que vayas a decir, pero con esto ¡Sin duda te expulsarán del equipo y finalmente seré la estrella! ¡Finalmente podre brillar!”
Tras sus palabras Cooper arrojó el medicamento al suelo mientras Jeremy se apresuró en un intento de tomarlo, aunque para su consternación vio como su inhalador era aplastado bajo la pisada del perro enfrente suyo mientras lo hacía con una sonrisa en sus labios, había llegado demasiado tarde y ahora solo quedaba un recuerdo de su medicamento regado en el piso. El lobo gruñendo de ira tomo al can de su uniforme y lo estrello contra uno de los casilleros, le inmovilizó con un brazo presionado contra su pecho y usó su otro brazo para golpearle en el vientre. Cada puñetazo obligaba al Rottweiler a expulsar una pequeña bocanada de aire de sus pulmones. Cooper cerró su puño y golpeó la cabeza del lupino casi en la sien derribándolo. Jeremy gimió un poco, frotándose el punto de impacto al sentir que la cabeza le daba vueltas después de que el golpe del otro can casi le dejara inconsciente. Se levantó lentamente, sacudiendo la cabeza.
"Más vale que seas capaz de hacer algo más que eso..." dijo el lobo en un tono bastante frío mientras alzaba los puños
Cooper iba a hablar, pero el puño del lobo se clavó con fuerza en el punto blando que tenía sobre el ombligo y, cuando se dobló con un soplo de aire que le abandonó, el otro puño del lobo le pasó por debajo de la barbilla y le hizo retroceder. Intentó asestar unos cuantos golpes, pero Jeremy los bloqueó por arriba y por abajo antes de asestar unos cuantos jabs a las costillas del Rottweiler. El lobo confió un poco al ver que tenía la ventaja y bajó levemente su guardia; y lo pagó cuando Cooper amagó con darle un puñetazo en la cara, sólo para llevar su otro puño hacia arriba y asestar un uppercut en el estómago de Jeremy, dejando al lobo sin aire.
Jeremy se regañó a sí mismo por dejar que ocurriera. Sintió un movimiento casi elástico cuando el puño del can se hundió en su torso. Retrocedió y trató de recuperar el aliento. Sus pulmones y la boca del estómago ardían como el fuego pero Cooper no se mostró comprensivo en lo más mínimo. Sin dejarle recuperarse mucho, se acercó para clavarle un derechazo y luego un izquierdazo en el estómago que le hizo doblarse aún más. Luego se colocó a su lado y lo agarró de los hombros para lanzar su rodilla en su estómago tres veces en rápida sucesión. Las rodillas del lobo se tambalearon un poco antes de caer a cuatro patas. Se sintió como si le hubieran disparado una bala de cañón en medio del estómago.
“Ya no eres tan rudo, ¿Verdad?” Se burló Cooper con una enfermiza sensación de satisfacción
Mientras Jeremy estaba sobre sus manos y rodillas, el can empezó a darle de patadas en el estómago saboreando la vista de la espalda del lobo tambaleándose hacia arriba con cada una así como los gruñidos que salían de su hocico. Mientras recibía las patadas del can, el lupino sintió como su ritmo cardiaco se disparaba y la adrenalina recorría todo su cuerpo a medida que su rabia se desbordaba, miró su inhalador roto con el medicamento preciado regado en el piso, ahora lo entendía, si algo pasaba en este momento, no podría culparse a sí mismo, se tendría que culpar al responsable directo de no poder controlarse más, sin poder mantenerlo para sí mismo Jeremy soltó una risa, que congeló al Rottweiler.
“Eres realmente un imbécil Cooper… el inhalador que rompiste no era para mantener mi salud a flote, sino todo lo contrario, era para mantener a los demás a salvo de mi, pero ahora que está roto... Creo que voy a tener que romperte a ti para poder controlarme.... mentiría si te dijera que no lo voy a disfrutar” dijo Jeremy mientras sujetaba al can mirándole con una siniestra sonrisa
Cooper no entendía el porqué, pero la expresión en el rostro de Jeremy hacía acelerar su corazón con anticipación y preocupación, pero, sobretodo con una gran sensación de miedo que llenaba todo su cuerpo dejándolo en un estado de alerta máxima, por este mismo motivo se apresuró a separarse del agarre de Jeremy mientras se alejaba lo más posible de él en el estrecho espacio de los casilleros, por un momento pasó por su cabeza que se encontraba jodido pues el lobo estaba bloqueando su única salida e intentar escalar los casilleros solo seria una perdida de tiempo por lo que solo le quedaba una opción. Sin más vacilación se apresuró contra Jeremy mostrando sus colmillos y garras mientras corría en su contra, sin embargo, Jeremy no se mostraba preocupado por eso, al contrario, podría verse una gran expresión retorcida de alegría en su rostro mientras se ponia en posicion para recibir la embestida del Rottweiler aunque, ese no era realmente el caso, en estos momentos Jeremy solo obedecía sus instintos mientras una gran euforia e ira se apoderaban de su mente por lo que simplemente planeaba jugar con Cooper antes de aplastarlo brutalmente. Aunque Cooper no era consciente de esto y por ende arremetió de lleno contra el lobo quien apenas se movió unos centímetros por su embestida sorprendiendo al agresor quien posteriormente sintió como sus piernas se alejaban del suelo para posteriormente ser arrojado contra los casilleros cercanos, la mente del can quedo en blanco sintiendo el impacto para posteriormente preguntarse cómo diablos Jeremy había logrado someterlo de ese modo pues él era consciente de que no era para nada ligero, aun con eso en mente se reincorporo rápidamente esquivando a tiempo la patada que Jeremy estaba por anotarle en ese instante.
"¡¿Qué mierda estás haciendo Jeremy?!" preguntó el can con algo de conmoción
Jeremy no respondió simplemente volvió a acercarse a Cooper aunque el can reaccionó rápidamente golpeando los tobillos de Jeremy logrando derribarlo para posteriormente arrojarse sobre él con algo de orgullo en su interior, haber logrado derribarlo lo había emocionado mientras preparaba su puño para darle una dura lección a Jeremy.
“¡¡¡No seas un jodido imbécil frente a mi!!!” Cooper escupió sus palabras mientras su puño impactaba el hocico de Jeremy con todas sus fuerzas “¡¡¡Ahora aprenderás a no meterte con Cooper, la próxima estrella del equipo!!!”
El Rottweiler siguió impactando golpe tras golpe. no le importaba lo que pasaría después, lo único que ahora le interesaba era dejar al lobo inconsciente, luego podría argumentar que había actuado en defensa propia luego de que Jeremy le agredieron sin motivo , sin embargo, el sonido tenebroso pero familiar de una risa se hizo presente para Cooper a la vez que sentía como uno de sus puños había sido sujetado por Jeremy mientras este lo miraba nuevamente con esa expresión retorcida de alegría en su rostro, intentó liberarse, pero, el agarre de Jeremy era realmente y mientras más pasaban los segundos una angustia cada vez mayor se hacía presente en su interior mientras sus instintos le gritaban que tenía que correr de allí, aun cuando su brazo no podía liberarse.
Fue en ese momento que un gran crujido se hizo presente rompiendo los constantes sonidos de forcejeo que hacía Cooper al intentar liberarse y posteriormente un grito desgarrador tomó lugar pues en el momento en que Jeremy apretó su agarre en la mano del can su muñeca había sido rota de golpe causando una sensación de dolor profunda en Cooper mientras Jeremy lo liberaba de una forma tenebrosamente casual
“¡Jajajajaja! ¡Que hermoso sonido! ¿Debemos repetirlo una vez más ¿no te parece?
Jeremy no espero la respuesta de Cooper y procedió a tomar el brazo de la muñeca rota y rápidamente rompió el radio y el cúbito de la extremidad provocando una nueva oleada de dolor en el Rottweiler derrumbado en el suelo mientras derramaba profusas lágrimas de sufrimiento y miraba aterrado la expresión en el rostro de Jeremy quien se acercaba nuevamente a él, podía ver como la sangre brotaba de la nariz del lobo a causa de los golpes que había recibido, pero eso a Jeremy no parecía afectarle.
“¡Maldito hijo de puta! ¡Aléjate de mi!” gritó Cooper presa del pánico mientras su ahora agresor se acercaba lentamente a él de una manera siniestramente juguetona
“¡Oh vamos! No puedes quejarte ahora, después de todo tu iniciaste esto, ¿crees que no me dolieron tus golpes? Solo te regreso el favor con creces, es por esto mismo que no debiste romper mi inhalador, aunque quiera controlarme en estos momentos no puedo, lo único que podría calmarme ahora es acabar contigo y es realmente divertido... ahora me planteo seriamente porque usaba esa porquería para mantenerme bajo control... ¡ESTO ES TAN DIVERTIDO!” dijo el lobo mirando a su presa con una sonrisa siniestra
Copper era ahora presa del terror más profundo que había sentido, se arrepentía de haberse metido con Jeremy, cerró los ojos preparándose para lo peor
“¡¡¡Jeremy, ¿Qué mierda te pasa?!!!” gritó una voz que hizo abrir los ojos al can, Cooper vio que su salvador no era otro que el Entrenador Harper
El Entrenador Harper había escuchado los gritos por lo que se dirigió a los vestidores, cuando llegó fue recibido con a imagen de Jeremy a punto de romper la pierna de Cooper con un pisotón, había logrado llegar a tiempo para poder detenerlo y sujetarlo con una llave aunque, con la fuerza física de Jeremy en estos momentos era una tarea realmente difícil, incluso para un oso tan grande como él que había sido parte del ejército, se preguntó por un instante porque mierda Jeremy actuaba de esa manera tan agresiva cuando al desviar la mirada por un momento vio su inhalador destrozado en el piso, solo tardó unos instantes en juntar las piezas para descubrir lo que había pasado y por un momento pensó que lo mejor habría sido haber dejado a Jeremy romper la pierna de Cooper para que aprendiera una verdadera lección, pero este no era el momento para eso, él había sido informado de antemano de la condición de Jeremy y sabía muy bien que mientras más tiempo pasara sin que su alumno tomara su medicación más agresivo, salvaje y peligroso sería.
“¡¿Cooper, puedes moverte?!” Preguntó el entrenador Harper con dificultad e ira en su voz mientras sostenía al lobo
“¡S-sí entrenador!” Respondió Cooper un poco más tranquilo aunque aún angustiado por el dolor que sentía en su brazo derecho
“Rápido, ve a mi oficina! En el cajón inferior derecho tengo otro inhalador con el medicamento de Jeremy, tráelo rápidamente si no quieres que esto empeore!” el Entrenador Harper prácticamente gruñó la orden mientras sostenía con dificultad a su alumno
Cooper al ver que su propio entrenador tenía una gran dificultad para contener a Jeremy no perdió el tiempo y corrió a su oficina ignorando su dolor mientras escuchaba a la distancia claramente como el entrenador llamaba a otro de sus compañeros para ayudarlo a contener al lobo, al entrar a la oficina buscó desesperadamente el otro inhalador, revisó de un lado a otro hasta finalmente encontrarlo, no tenía ninguna clase de etiqueta o alguna clase de especificación que indicará su contenido, pero había visto de primera mano el que había hurtado del casillero de Jeremy por lo que no dudo en que fuera lo que necesitaba e inmediatamente se dirigió de nuevo a los vestidores para ver al entrenador Harper y a Robert uno de sus compañeros el cual era un rinoceronte sosteniendo a Jeremy con algo de dificultad, ignoro esto y corrió hacia ellos entregando el inhalador. Posteriormente el entrenador Harper le indicó que él tendría que administrar el medicamento mientras ellos dos sostenían al lobo, Cooper se sintió intimidado por un momento pero entendió que no tenía opción y siguió las instrucciones del entrenador... por unos momentos el sonido del inhalador fue lo único que se escuchó en el área para posteriormente ser seguidos por más forcejeos de Jeremy sorprendiendo a Harper quien lo miró con preocupación.
“¡Esto no debería pasar! Se supone que una dosis es más que suficiente para calmarlo, vuelve a aplicar el inhalador, puede que sea necesaria una dosis mayor por el tiempo de retraso!” Ordenó el entrenador Harper mientras un hilo de preocupación asomaba en su voz
Realmente se encontraba asustado en estos momentos, era consciente de los potentes analgésicos que se encontraban en la fórmula del inhalador y sabía muy bien que una sobredosis podría ser mortal para su estudiante, sin embargo, en esta situación no tenía más opción que administrar una segunda dosis, tras otros momentos de arrebatos lograron administrar la segunda dosis, esta vez después de ello Jeremy se calmó enormemente al punto de perder todas sus fuerzas mientras lentamente caía inconsciente como efecto secundario de la alta dosis de su inhalador aunque no era nada grave afortunadamente. Tras esperar unos minutos, asegurándose de que Jeremy se encontraba estable, el entrenador Harper lo liberó llevándolo a la enfermería junto con Cooper quien se mantenía más de un metro detrás suyo, ocultando su rostro con culpa temor mientras lamentaba sus elecciones anteriores.
Jeremy se encontraba agachado junto al resto de sus compañeros de equipo, podía sentir como su corazón latía con fuerza en su pecho. La multitud estaba sentada al borde de sus asientos, la anticipación los mataba. El sudor caía por su frente ya que los nervios le habían alcanzado por fin. Por algo el equipo del instituto Trenton era su mayor rival Trenton estaba arriba por 5 puntos, y quedaba poco tiempo en el reloj, el lobo sabía que habían pocas posibilidades de que se pudieran llevar la victoria, el equipo de Trenton sólo tenía que dejar correr el reloj y el partido se acabaría. Pero no había forma de que se diera por vencido, el juego aún seguía en marcha.
El quarterback del equipo de Trenton preparó la jugada, entonces justo cuando iba a lanzar el balón, Kyle un tigre siberiano, cargó contra él con un rugido que hizo temblar el estadio. Atravesó a los defensores de Trenton y golpeó con todas sus fuerzas al quarterback, haciendo que retrocediera al menos metro y medio. La acción del tigre liberó el balón de las manos del quarterback y ahora se encontraba volando en el aire. Los jugadores de ambos equipos parecieron congelarse y todo el estadio quedó en silencio por un momento. Jeremy estaba esperando justo un momento como este, por lo que saltó con todas sus fuerzas y tomó el balón , y el público estalló cuando el equipo defensivo se convirtió en el ofensivo y Jeremy empezó a correr hacia la zona de anotación. El equipo de Trenton trató de atacar al lobo para impedir que anotara, pero lupino evadió cada intentó y lanzó el balón con un aullido fuerte en señal de victoria.
“¡Y con ese touchdown el Instituto Arlington se lleva la victoria damas y caballeros! ¡Jeremy Carter lo ha hecho de nuevo!”
La voz del anunciador no era más que un zumbido dentro del casco del joven lobo, los sonidos de su jadeante y sudorosa respiración vibraban en la carcasa de aleación de plástico. Jeremy abrió los ojos débilmente, se enfrentó a las gradas llenas de fursonas vitoreando y gritando eufóricamente, sintiendo los terrones de césped fríos y ásperos bajo sus patas, sonrió, agitando una pata lentamente para provocar los gritos que consolidaban su récord. El lupino de 18 años había corrido más de sesenta yardas, hasta la zona de anotación para anotar el touchdown que les permitió ganar su tercer título consecutivo, por un punto; la final más reñida y agotadora de la temporada.
Se sentía entumecido, la sonrisa en su rostro se quedó allí mientras sus compañeros se amontonaron sobre él con abrazos y golpes en la espalda, mientras que los oponentes, miraban al lobo con tanta malicia que si fueran cuchillos atravesarían el pecho de Jeremy. Mientras el lobo era llevado fuera del campo por sus compañeros, escudriñó a la multitud en busca de alguna señal de su padre, pero sólo vio a las animadoras abrazándose y gritando estridentemente, y a los padres de sus compañero que habían venido a animar a sus hijos, pero ningún rastro de su padre. El grupo llevó al lobo hasta la banda lateral donde fueron detenidos por el Entrenador Harper.
"Buen trabajo Jeremy. Nos has hecho ganar el partido" dijo el oso polar
“Gracias entrenador” dijo Jeremy quitándose el casco y sonriendo de oreja a oreja
“Muy bien chicos, ¡A los vestidores!" indicó el entrenador Harper
El equipo gritó y vitoreó mientras empezaban a correr hacia los vestidores. Por su parte Jeremy se quitó el casco y se sentó en una banca, Kyle se sentó a su lado y envolvió su brazo alrededor de los hombros de su amigo.
"Esa fue una muy buena jugada. Tal vez deberíamos tenerte en el equipo ofensivo" dijo el tigre
“Yo no hubiera podido obtener la pelota si tu no hubieras derribado a su quarterback” dijo Jeremy
“Tal vez, pero si no la hubieras atrapado, entonces habríamos perdido” dijo Kyle
“Hubiera sido mejor si mi padre hubiera estado presente para verlo” comentó Jeremy gruñendo bajo de lo frustrado que se sentía “Me prometió que este partido no se lo iba a perder”
El tigre hizo una mueca, la urgencia de hacer una broma fue pisoteada por la mirada fulminante del lobo, una mirada que el tigre sabía que hacía temblar a los rivales. Suspiró, y se puso de pie, tratando de no mirar a su mejor amigo con lástima.
“Bueno...yo y algunos chicos planeamos ir a comer pizza, ¿Vienes?” preguntó Kyle
Jeremy negó con la cabeza, suspirando y miró con una leve sonrisa a su amigo, inclinándose hacia atrás con la cola moviéndose de un lado a otro con pereza. El agua aún goteaba de su pelaje, y se sacudió rigurosamente, haciendo de su pelaje un desastre.
"Está bien, nos vemos” dijo Kyle
“Claro amigo” dijo el lobo
El tigre se dirigió hacia los vestidores, dejando que Jeremy contemplara el campo vacío con una sensación de pertenencia.Las brillantes luces resplandecían sobre los bloques y rayas verdes y blancas, aterrorizando a la luna del cielo junto con las estrellas para dejar un fondo negro, una noche sólida para contrastar la luminiscencia. La hierba brillaba como un relámpago, una miniatura de paisaje que resplandecía de color esmeralda en la falta de luz de la tarde. Jeremy miró hacia abajo, haciendo una mueca al ver las manchas igualmente brillantes en todo su uniforme azul real, todos los colores en alto contraste con su pelaje color marrón, podía sentir sus músculos adoloridos, y no había otra palabra para definirlo que victoria. Pronto el calor de las luces y el sudor que recorría su cuerpo fue demasiado como para permanecer más tiempo disfrutando de su logro, por lo que se puso de pie y se dirigió a los vestidores.
Cuando entró fue recibido por la vista de su casillero abierto, gruño molesto y corrió hacia el, empezó a buscar en su interior con algo de miedo, no estaba, busco nuevamente sin mejor resultado, se preguntaba quién rayos podría estar haciendo algo como eso cuando la respuesta llegó a sus espaldas con el sonido más que familiar de su inhalador disparando una de sus cargas. Dejando caer al suelo su casco se dio la vuelta para confrontar al responsable, un Rottweiler vestido con el mismo uniforme que el lobo, quien le miraba con una sonrisa
“Hola Jeremy, realmente no te esperaba aquí tan pronto” dijo el can
“Cooper, tu perro infeliz, ¡¡¿Qué diablos estás haciendo?!!” gruñó Jeremy
“¿Me llamas perro sin más? Sabes bien que odio eso” dijo Cooper mientras presionaba el inhalador, disparando dos cargas más ante los ojos de Jeremy “Soy un Rottweiler y sabes bien que odio que me digas de ese modo”
“¡Me importa un carajo lo que digas! ¿Qué mierda se supone que estas haciendo con mis cosas?” Pregunto Jeremy gruñendo con ira
“¿Te preguntas qué hago? Yo debería preguntar eso, se supone que si entras al equipo es porque no padeces ninguna afección y puedes hacer deportes sin riesgo como lo digas las normas de competición, sin embargo, he notado como de vez en cuando, al terminar el partido usas este inhalador, no tiene ninguna etiqueta pero puedo suponer que es para algún mal pulmonar y lo has estado ocultando con esa sonrisa de mierda después de cada partido y cada práctica..” Respondió Cooper mirando al lobo de una manera sombría mientras apretaba el inhalador en sus manos “... ¿Tienes idea de la mierda que es eso?... Esforzarse constantemente para conseguir resultados, día tras día tras día sin nada de progreso, y cada vez que siento que estoy alcanzando mi meta… ¡¡¡Tu apareces y robas la atención de todos!!! He estado a tu puta sombra esperando que algo pase para poder mostrar mis habilidades, pero el jodido y perfecto Jeremy siempre hace algo que me hace retroceder cinco pasos ¡¡¡Tu simplemente estorbas siempre que es mi oportunidad, me la robas de las manos!!!, pero, esta vez te atrape, me importa un carajo lo que vayas a decir, pero con esto ¡Sin duda te expulsarán del equipo y finalmente seré la estrella! ¡Finalmente podre brillar!”
Tras sus palabras Cooper arrojó el medicamento al suelo mientras Jeremy se apresuró en un intento de tomarlo, aunque para su consternación vio como su inhalador era aplastado bajo la pisada del perro enfrente suyo mientras lo hacía con una sonrisa en sus labios, había llegado demasiado tarde y ahora solo quedaba un recuerdo de su medicamento regado en el piso. El lobo gruñendo de ira tomo al can de su uniforme y lo estrello contra uno de los casilleros, le inmovilizó con un brazo presionado contra su pecho y usó su otro brazo para golpearle en el vientre. Cada puñetazo obligaba al Rottweiler a expulsar una pequeña bocanada de aire de sus pulmones. Cooper cerró su puño y golpeó la cabeza del lupino casi en la sien derribándolo. Jeremy gimió un poco, frotándose el punto de impacto al sentir que la cabeza le daba vueltas después de que el golpe del otro can casi le dejara inconsciente. Se levantó lentamente, sacudiendo la cabeza.
"Más vale que seas capaz de hacer algo más que eso..." dijo el lobo en un tono bastante frío mientras alzaba los puños
Cooper iba a hablar, pero el puño del lobo se clavó con fuerza en el punto blando que tenía sobre el ombligo y, cuando se dobló con un soplo de aire que le abandonó, el otro puño del lobo le pasó por debajo de la barbilla y le hizo retroceder. Intentó asestar unos cuantos golpes, pero Jeremy los bloqueó por arriba y por abajo antes de asestar unos cuantos jabs a las costillas del Rottweiler. El lobo confió un poco al ver que tenía la ventaja y bajó levemente su guardia; y lo pagó cuando Cooper amagó con darle un puñetazo en la cara, sólo para llevar su otro puño hacia arriba y asestar un uppercut en el estómago de Jeremy, dejando al lobo sin aire.
Jeremy se regañó a sí mismo por dejar que ocurriera. Sintió un movimiento casi elástico cuando el puño del can se hundió en su torso. Retrocedió y trató de recuperar el aliento. Sus pulmones y la boca del estómago ardían como el fuego pero Cooper no se mostró comprensivo en lo más mínimo. Sin dejarle recuperarse mucho, se acercó para clavarle un derechazo y luego un izquierdazo en el estómago que le hizo doblarse aún más. Luego se colocó a su lado y lo agarró de los hombros para lanzar su rodilla en su estómago tres veces en rápida sucesión. Las rodillas del lobo se tambalearon un poco antes de caer a cuatro patas. Se sintió como si le hubieran disparado una bala de cañón en medio del estómago.
“Ya no eres tan rudo, ¿Verdad?” Se burló Cooper con una enfermiza sensación de satisfacción
Mientras Jeremy estaba sobre sus manos y rodillas, el can empezó a darle de patadas en el estómago saboreando la vista de la espalda del lobo tambaleándose hacia arriba con cada una así como los gruñidos que salían de su hocico. Mientras recibía las patadas del can, el lupino sintió como su ritmo cardiaco se disparaba y la adrenalina recorría todo su cuerpo a medida que su rabia se desbordaba, miró su inhalador roto con el medicamento preciado regado en el piso, ahora lo entendía, si algo pasaba en este momento, no podría culparse a sí mismo, se tendría que culpar al responsable directo de no poder controlarse más, sin poder mantenerlo para sí mismo Jeremy soltó una risa, que congeló al Rottweiler.
“Eres realmente un imbécil Cooper… el inhalador que rompiste no era para mantener mi salud a flote, sino todo lo contrario, era para mantener a los demás a salvo de mi, pero ahora que está roto... Creo que voy a tener que romperte a ti para poder controlarme.... mentiría si te dijera que no lo voy a disfrutar” dijo Jeremy mientras sujetaba al can mirándole con una siniestra sonrisa
Cooper no entendía el porqué, pero la expresión en el rostro de Jeremy hacía acelerar su corazón con anticipación y preocupación, pero, sobretodo con una gran sensación de miedo que llenaba todo su cuerpo dejándolo en un estado de alerta máxima, por este mismo motivo se apresuró a separarse del agarre de Jeremy mientras se alejaba lo más posible de él en el estrecho espacio de los casilleros, por un momento pasó por su cabeza que se encontraba jodido pues el lobo estaba bloqueando su única salida e intentar escalar los casilleros solo seria una perdida de tiempo por lo que solo le quedaba una opción. Sin más vacilación se apresuró contra Jeremy mostrando sus colmillos y garras mientras corría en su contra, sin embargo, Jeremy no se mostraba preocupado por eso, al contrario, podría verse una gran expresión retorcida de alegría en su rostro mientras se ponia en posicion para recibir la embestida del Rottweiler aunque, ese no era realmente el caso, en estos momentos Jeremy solo obedecía sus instintos mientras una gran euforia e ira se apoderaban de su mente por lo que simplemente planeaba jugar con Cooper antes de aplastarlo brutalmente. Aunque Cooper no era consciente de esto y por ende arremetió de lleno contra el lobo quien apenas se movió unos centímetros por su embestida sorprendiendo al agresor quien posteriormente sintió como sus piernas se alejaban del suelo para posteriormente ser arrojado contra los casilleros cercanos, la mente del can quedo en blanco sintiendo el impacto para posteriormente preguntarse cómo diablos Jeremy había logrado someterlo de ese modo pues él era consciente de que no era para nada ligero, aun con eso en mente se reincorporo rápidamente esquivando a tiempo la patada que Jeremy estaba por anotarle en ese instante.
"¡¿Qué mierda estás haciendo Jeremy?!" preguntó el can con algo de conmoción
Jeremy no respondió simplemente volvió a acercarse a Cooper aunque el can reaccionó rápidamente golpeando los tobillos de Jeremy logrando derribarlo para posteriormente arrojarse sobre él con algo de orgullo en su interior, haber logrado derribarlo lo había emocionado mientras preparaba su puño para darle una dura lección a Jeremy.
“¡¡¡No seas un jodido imbécil frente a mi!!!” Cooper escupió sus palabras mientras su puño impactaba el hocico de Jeremy con todas sus fuerzas “¡¡¡Ahora aprenderás a no meterte con Cooper, la próxima estrella del equipo!!!”
El Rottweiler siguió impactando golpe tras golpe. no le importaba lo que pasaría después, lo único que ahora le interesaba era dejar al lobo inconsciente, luego podría argumentar que había actuado en defensa propia luego de que Jeremy le agredieron sin motivo , sin embargo, el sonido tenebroso pero familiar de una risa se hizo presente para Cooper a la vez que sentía como uno de sus puños había sido sujetado por Jeremy mientras este lo miraba nuevamente con esa expresión retorcida de alegría en su rostro, intentó liberarse, pero, el agarre de Jeremy era realmente y mientras más pasaban los segundos una angustia cada vez mayor se hacía presente en su interior mientras sus instintos le gritaban que tenía que correr de allí, aun cuando su brazo no podía liberarse.
Fue en ese momento que un gran crujido se hizo presente rompiendo los constantes sonidos de forcejeo que hacía Cooper al intentar liberarse y posteriormente un grito desgarrador tomó lugar pues en el momento en que Jeremy apretó su agarre en la mano del can su muñeca había sido rota de golpe causando una sensación de dolor profunda en Cooper mientras Jeremy lo liberaba de una forma tenebrosamente casual
“¡Jajajajaja! ¡Que hermoso sonido! ¿Debemos repetirlo una vez más ¿no te parece?
Jeremy no espero la respuesta de Cooper y procedió a tomar el brazo de la muñeca rota y rápidamente rompió el radio y el cúbito de la extremidad provocando una nueva oleada de dolor en el Rottweiler derrumbado en el suelo mientras derramaba profusas lágrimas de sufrimiento y miraba aterrado la expresión en el rostro de Jeremy quien se acercaba nuevamente a él, podía ver como la sangre brotaba de la nariz del lobo a causa de los golpes que había recibido, pero eso a Jeremy no parecía afectarle.
“¡Maldito hijo de puta! ¡Aléjate de mi!” gritó Cooper presa del pánico mientras su ahora agresor se acercaba lentamente a él de una manera siniestramente juguetona
“¡Oh vamos! No puedes quejarte ahora, después de todo tu iniciaste esto, ¿crees que no me dolieron tus golpes? Solo te regreso el favor con creces, es por esto mismo que no debiste romper mi inhalador, aunque quiera controlarme en estos momentos no puedo, lo único que podría calmarme ahora es acabar contigo y es realmente divertido... ahora me planteo seriamente porque usaba esa porquería para mantenerme bajo control... ¡ESTO ES TAN DIVERTIDO!” dijo el lobo mirando a su presa con una sonrisa siniestra
Copper era ahora presa del terror más profundo que había sentido, se arrepentía de haberse metido con Jeremy, cerró los ojos preparándose para lo peor
“¡¡¡Jeremy, ¿Qué mierda te pasa?!!!” gritó una voz que hizo abrir los ojos al can, Cooper vio que su salvador no era otro que el Entrenador Harper
El Entrenador Harper había escuchado los gritos por lo que se dirigió a los vestidores, cuando llegó fue recibido con a imagen de Jeremy a punto de romper la pierna de Cooper con un pisotón, había logrado llegar a tiempo para poder detenerlo y sujetarlo con una llave aunque, con la fuerza física de Jeremy en estos momentos era una tarea realmente difícil, incluso para un oso tan grande como él que había sido parte del ejército, se preguntó por un instante porque mierda Jeremy actuaba de esa manera tan agresiva cuando al desviar la mirada por un momento vio su inhalador destrozado en el piso, solo tardó unos instantes en juntar las piezas para descubrir lo que había pasado y por un momento pensó que lo mejor habría sido haber dejado a Jeremy romper la pierna de Cooper para que aprendiera una verdadera lección, pero este no era el momento para eso, él había sido informado de antemano de la condición de Jeremy y sabía muy bien que mientras más tiempo pasara sin que su alumno tomara su medicación más agresivo, salvaje y peligroso sería.
“¡¿Cooper, puedes moverte?!” Preguntó el entrenador Harper con dificultad e ira en su voz mientras sostenía al lobo
“¡S-sí entrenador!” Respondió Cooper un poco más tranquilo aunque aún angustiado por el dolor que sentía en su brazo derecho
“Rápido, ve a mi oficina! En el cajón inferior derecho tengo otro inhalador con el medicamento de Jeremy, tráelo rápidamente si no quieres que esto empeore!” el Entrenador Harper prácticamente gruñó la orden mientras sostenía con dificultad a su alumno
Cooper al ver que su propio entrenador tenía una gran dificultad para contener a Jeremy no perdió el tiempo y corrió a su oficina ignorando su dolor mientras escuchaba a la distancia claramente como el entrenador llamaba a otro de sus compañeros para ayudarlo a contener al lobo, al entrar a la oficina buscó desesperadamente el otro inhalador, revisó de un lado a otro hasta finalmente encontrarlo, no tenía ninguna clase de etiqueta o alguna clase de especificación que indicará su contenido, pero había visto de primera mano el que había hurtado del casillero de Jeremy por lo que no dudo en que fuera lo que necesitaba e inmediatamente se dirigió de nuevo a los vestidores para ver al entrenador Harper y a Robert uno de sus compañeros el cual era un rinoceronte sosteniendo a Jeremy con algo de dificultad, ignoro esto y corrió hacia ellos entregando el inhalador. Posteriormente el entrenador Harper le indicó que él tendría que administrar el medicamento mientras ellos dos sostenían al lobo, Cooper se sintió intimidado por un momento pero entendió que no tenía opción y siguió las instrucciones del entrenador... por unos momentos el sonido del inhalador fue lo único que se escuchó en el área para posteriormente ser seguidos por más forcejeos de Jeremy sorprendiendo a Harper quien lo miró con preocupación.
“¡Esto no debería pasar! Se supone que una dosis es más que suficiente para calmarlo, vuelve a aplicar el inhalador, puede que sea necesaria una dosis mayor por el tiempo de retraso!” Ordenó el entrenador Harper mientras un hilo de preocupación asomaba en su voz
Realmente se encontraba asustado en estos momentos, era consciente de los potentes analgésicos que se encontraban en la fórmula del inhalador y sabía muy bien que una sobredosis podría ser mortal para su estudiante, sin embargo, en esta situación no tenía más opción que administrar una segunda dosis, tras otros momentos de arrebatos lograron administrar la segunda dosis, esta vez después de ello Jeremy se calmó enormemente al punto de perder todas sus fuerzas mientras lentamente caía inconsciente como efecto secundario de la alta dosis de su inhalador aunque no era nada grave afortunadamente. Tras esperar unos minutos, asegurándose de que Jeremy se encontraba estable, el entrenador Harper lo liberó llevándolo a la enfermería junto con Cooper quien se mantenía más de un metro detrás suyo, ocultando su rostro con culpa temor mientras lamentaba sus elecciones anteriores.
Última edición: