Machinas? que interesante, al final resultará que volveremos a ver a este tío.
De normal se aplica el que si usa cartas que existen, es que tiene altas posibilidades de ser de relleno porque no tiene cartas que "vender"(?)
Suena a trampa o... a que quiere un polvete la jefa XD
Al final era un poco las dos cosas XD
Eso es revelador y seguro que va a ser de peso para la trama.
De lo que dije en discord de que en este temporada tenía varios candidatos sobre a quien poner de final boss de temporada, en gran parte es por Rieki XD
Otra que cae al redil del 3ro, ¿Seguro que no es un Harem fic? XD
Descubriste el secreto, es un fic harem XD Nah, ya despues dediussa creo que ya no saldrá ninguno a la que le guste Yuzird.
Allá va el nuevo cap.
Capítulo 45
La proposición de Fuyiko
-¿Diussa?
Los rayos de sol traspasaban los cristales, provocando que Yuzird se despertara. Estaba en la cama de Diussa, pero ella ya no estaba allí.
-¿Dónde estará?
A los pocos segundos, la mujer entró en la habitación, ya totalmente vestida para trabajar. También llevaba una bandeja con el desayuno.
-Oh, ¿me traes el desayuno?-sonrió Yuzird-. Qué romántico. Aunque creo que eso debería haberlo hecho yo, ja, ja.
-En realidad no tiene nada de romántico. Lo hago para echarte de casa.
-¿Eh?
-No todos tenemos el día libre, ¿sabes? Algunos tenemos que trabajar, así que tienes que irte.
-Oh, ¿así que temes que el Tercero pueda robar algo de tu casa?
-No creo que haya nada comprometido en mi casa, pero aun así, tampoco hace tanto que nos conocemos. Sería inapropiado dejarte solo en mi casa, ¿no crees? Pero no te preocupes, estás invitado para venir otro día-sonrió tras decir esto último-. Desayuna, vístete y nos vamos.
-Como órdenes.
Cinco minutos más tarde, los dos abandonaban la casa. Diussa volvió a activar el sistema de seguridad espiritual.
-Tengo el coche por allí, ¿me acompañas?
-Claro.
De camino al coche, a la mujer se le ocurrió hablar sobre un tema de conversación bastante popular estos últimos días.
-Por cierto, tú eres un duelista, y además el Tercero, por lo que quería preguntarte una cosa.
-¿Tú no lo eres?-se sorprendió Yuzird ante la pregunta.
-Conozco las reglas, pero no tengo aun una baraja. Las cartas se usan tanto como herramienta de entretenimiento y hasta pueden usarse también como lucha. Lo cierto es que nunca he tenido mucho tiempo para entretenerme, y hasta que llegó esa mujer, Rieki, solo éramos una empresa que nos dedicábamos a los Esprictores, por lo que no teníamos ningún enemigo que requiriese ese tipo de enfrentamientos. A partir de ahí, sí me adiestraron en otro tipo de armas-dijo sacando un pequeño blaster de su bolso.
-Ya veo. ¿Y que querías preguntar?
-Últimamente se habla mucho de los llamados monstruos Dominantes. Pero hasta hace poco no había oído hablar de ellos. Dicen que tú, el Tercero, los usa, así como ese inspector, ese Kenigata.
-Ah, sí, es verdad, los usamos. Puede que no hayas oído hablar mucho de ellos porque requiere que un espíritu te los otorgue de alguna forma. Aunque conozco a una persona que los ha adquirido de una forma distinta-le contó, haciendo referencia a Kaius.
-Básicamente, el secreto está en los espíritus-comprendió Diussa.
-Sí, eso parece.
-
Si desciframos el código espiritual de los espíritus, puede que con los Esprictores podamos crear también monstruos Dominantes, al igual que hacemos con el resto de cartas-pensó Diussa-.
Eso podría hacer crecer aún más a la empresa.
-Oh, ahí está mi coche-interrumpió Yuzird los pensamientos de su pareja.
Cuando Diussa vio el coche que le había señalado Yuzird, no pudo evitar reír a carcajadas.
-Ja, ja, ja ¿en serio, ese trasto?-expresó observando el coche, un clásico Fiat 500 amarillo, un modelo muy viejo-. Esperaba algo con más clase para el gran Tercero.
-Pues a mí me gusta-se ofendió Yuzird.
-Bueno, yo tengo el coche aparcado algo más lejos-dijo Diussa dándole un beso de despedida-. Te llamo cuando acabe de trabajar. Seguro que sale el tema de “cómo acabar con el Tercero”. Adiós.
-Adiós.
Más tarde, Yuzird fue al hotel donde estaban hospedados sus compañeros, Yigen, Fuyiko, Yuzét, Blaria, Rogull y Frila.
-¡¿Cómo?! ¿Qué la chica con la que estabas saliendo es justamente la jefa de Sprictor Corp, la mujer que vimos en el puerto?-se sorprendió Yigen.
-Sí, ja, ja, ¿tiene gracia, no?
-No tiene nada de gracia-dijo Rogull tomándose el asunto muy en serio.
-Está claro que no podemos confiar en este tío. Si yo fuera Kaius, lo echaría, no le necesitamos-expresó Blaria.
-¿Y qué vas a hacer ahora?-le preguntó Yuzét.
-¿Que qué voy a hacer?-se sorprendió el ladrón.
-Sí, ¿vas a cortar con ella?-le sugirió Fuyiko sin tapujos-. Es el enemigo al fin y al cabo.
-Es cierto, e incluso nos has contado que ha Sprictor Corp estuvo relacionada con la muerte de tu hermano-añadió Frila-. No puedes estar con alguien así.
-Bueno, en realidad ella no está directamente involucrada con ese asunto.
-Pero has dicho que es la hija del Jester, que fue un gran rival de tu padre. ¿No es algo raro salir con ella?-preguntó ahora Yigen.
-Puede que un poco, pero soy el Tercero, por naturaleza ya me junto siempre con gente rara.
-Aunque si estás con ella, puede que podamos usarla para conseguir más información sobre Sprictor Corp-expresó Rogull.
-No, hemos acordado separar el trabajo de nuestra vida personal. Es decir, yo como Tercero, intentaré evitar que el Jester y sus hombres reúnan las 4 Joyas Elementales, y ella como hija del Jester, intentará dejarme fuera de juego. Pero Yuzird y Diussa serán ajenos a eso.
-Sprictor Corp, empresa que se dedica al desarrollo de potentes Esprictores que extraen la energía de los espíritus, quiere reunir las 4 Joyas Elementales, y además tienen entre manos ese “Proyecto Alphard”. Seguro que no es nada beneficioso para los espíritus-dijo Yuzét-. ¿Y aun así vas a ser seguir viendo a esa persona?
-Sí.
-¿Aunque su familia esté relacionada con la muerte de tu hermano, el padre de Ere? Esa fue la razón por la que tú y yo tuvimos que separarnos…-mencionó Frila.
-Sí.
-¿Sabes, Yuzird? Creo que los hombres que me perseguían y que nos atacaron en la mansión de Duver, debían ser hombres de Sprictor Corp. ¡Intentaron matarme!-exclamó Fuyiko-. ¿De verdad no vas a romper con ella?
-No.
-Y tampoco quieres aprovechar vuestra relación para conseguir más información-se cruzó de brazos Rogull.
-Exacto.
-No esperaba esto de ti, Yuzird. Estar con una persona que de alguna forma está relacionada con la muerte de tu hermano, con causó nuestra separación…-dijo Frila dándose la vuelta para salir de la habitación-. Me has decepcionado.
-A mí también. Los de Sprictor Corp intentaron matarme. ¡Me voy!-salió Fuyiko de la habitación dando un portazo en la puerta.
-Chicas, esperad-las intentó detener Yuzird. Entonces Yuzét se posó delante de él.
-Después de todo lo que hemos vivido, incluso de haber estado vinculados… ¡No puedo creer que estén con alguien que fabrica Esprictores! ¡No sabía que eras ese tipo de persona!-se marchó Yuzét volando como si nadara en el agua, traspasando la puerta y desapareciendo así de la vista de Yuzird.
-Espera, Yuzét…-la intentó detener sin éxito. Luego Yuzird miró a la única chica que quedaba en la habitación, Blaria.
-¡A mí también me caes mal, aunque no tenga nada que ver con todo lo que nos has contado!-le gritó la joven-. ¡Me voy también!
-Vaya, que difícil es ser popular-comentó Yuzird llevándose a mano a la cabeza.
Normalmente Yigen no era de las personas que solían gastar bromas, pero esta vez vio una oportunidad única y no la dejó escapar.
-Veamos qué opina de esto la joven Idia-sonrió mientras realizaba una llamada.
-¿Eh? ¿Idia?
-Idia, soy yo, Yigen. No tranquila, no ha pasado nada. Solo quería decirte que Yuzird se ha echado una novia mientras tú te has quedado en Rasugaria.
-¡¡ ¿Quéeeeeeeeeeee?!!-se oyó el grito de la joven.
-Genial, ahora me odian todas.
En Sprictor Corp, aparte de la información que Diussa les contó a su padre y los demás lo ocurrido en la reunión en el puerto, habló sobre los monstruos Dominantes.
-¿Esos monstruos de los que se ha hablado últimamente?-preguntó Viason.
-Sí, creo que si dedicamos más tiempo a analizar el código espiritual de los espíritus, podríamos crear nuestros propios monstruos Dominantes.
-¿Pero merece la pena?-comentó Llass.
-Sí, algunos de nosotros ya tenemos nuestra baraja construida.
-¿Insinúas que la idea de la señorita Diussa no es buena?-frunció el ceño Inobi-. Qué descarados. No te preocupes, cariño, yo creo que es una buena idea.
-Esto no es solo para nosotros, sino que es por el bien de la empresa. Algo así creo que nos haría crecer aún más.
-Estoy de acuerdo con mi hija-entró entonces Soncen, acompañado de Rieki-. Algunos se creen que el Tercero es especial por tener monstruos Dominantes. Si conseguimos crearlos, haríamos ver al Tercero que podemos usar sus mismos trucos. Hasta es probable que ellos no se lo esperen. Podrían ser una buena adición a mi deck-mencionó sacándolo del bolsillo de su chaqueta-. El Primero en su día me venció por poco. Si añado monstruos Dominantes a mi deck, seré más poderoso que él.
-A mí también me parece una buena idea, aunque en mi caso creo que prefiero quedarme con el deck que adquirí aquella vez. Bien pensado, Diussa-dijo la mujer de cabello verde acercándose para darle un beso en la mejilla, lo cual la incomodó-. ¿Pero cómo se te ha ocurrido? Aparte de al Tercero y a ese inspector de policía, no se han visto muchos más monstruos Dominantes.
Las palabras de Rieki provocaron que todos centraron su atención en Diussa.
-Las otras cartas se crean también a través de la energía de los espíritus. Así que no hay razón para pensar que los Dominantes sean diferentes, solo hay que descifrar como crearlos. Además, según textos de la antigüedad, los monstruos Dominantes datan de la época de cuando los humanos y espíritus solían vincularse. Por lo que he llegado a la conclusión de que el secreto está en los espíritus-contestó Diussa, obviando que se le había ocurrido tras hablar con Yuzird-. Con nuestros potentes Esprictores, deberíamos ser capaces de descubrir su secreto y crearlos.
-Oh, vaya…
-Así de lista es mi hija. Bien, asignaremos un equipo de investigación a ello. Volver nuestros decks más poderosos puede ser de gran utilidad ahora que estamos en guerra con el Tercero. Y Diussa, creo que ha llegado el momento de que tú también te hagas con tu propio deck.
-Claro, padre.
-El deck de la hija del Jester-sonrió Soncen.
-En ese caso, usad la energía de una de las Joyas Elementales-propuso Rieki-. Un deck construido con su energía será aún más poderoso.
-Perdonad la interrupción-se disculpó Viason-. Pero dijiste que junto al Tercero había un hombre con sombrero, barba, cabello oscuro, que aparentemente era un pistolero…
-Así es-le corroboró Diussa.
-Yigen…-sonrió entonces.
Tal y como habían acordado el día anterior, Yuzét y Yigen viajaron de nuevo a Rasugaria, por si acaso su presencia era necesaria. Yuzird se encontraba solo en la habitación del hotel, sentado en el sofá. Entonces la puerta se abrió y entró Fuyiko.
-Oh, Fuyiko, has vuelto. ¿Ya se te ha pasado el enfado?
-Bueno, eso dependerá de ti-sonrió Fuyiko de forma enigmática.
Enseguida el Tercero se dio cuenta de que había cambiado algo en ella.
-¿Has ido a la peluquería?
-Sí, me he cortado el pelo un poco, y me he aplicado un tinte más oscuro-dijo Fuyiko tocándose el cabello con la mano derecha. Éste seguía siendo largo, pero no tanto como antes. Su tono de castaño era ahora más oscuro también-. ¿Te gusta?
-Sí, te queda muy bien.
-Bueno-dijo sentándose en la rodilla de Yuzird-, yo creo que no necesitas nada de esa mujer que yo no pueda ofrecerte, Yuzird.
-¿Qué dices, Fuyiko?-se puso rojo Yuzird.
-Tienes que ser solo mío y de nadie más, Yuzird. Te contaré un secreto sobre Sprictor Corp como muestra de buena voluntad.
-¿Un secreto?
-Sprictor Corp ya tiene en su poder 2 de las 4 Joyas Elementales. La del Agua y la del Fuego. Si consigues robárselas, luego ya solo tendrías que hacerte con l Joya de la Tierra. Seguro que Kaius se enfadaría, ¿pero qué importa? Habrías cumplido el objetivo que ni tu padre ni tu hermano lograron-dijo llevando sus manos a la cara de Yuzird-. Juntos podremos hacerlo.
-Ah, sobre eso… Sí, ya imaginaba que Sprictor Corp tenía en su poder al menos una de las otras dos Joyas Elementales.
-¿Qué?
-Piénsalo, si quieren reunir las 4 Joyas Elementales y atacaron a Shaga, que también quería reunirlas, lo más probable es que fuera porque Shaga ya había reunido al menos una de las Joyas Elementales.
-Bueno, visto así… De todas formas, ¿Qué dices de mi oferta? Nos vengaremos de lo que le ocurrió a tu hermano y…-preguntó acercando sus labios a los del Tercero.
-Ah, tengo que irme-se levantó de golpe Yuzird, provocando que Fuyiko cayera sobre el sofá-. He quedado con Diussa, lo siento. Además, tú me dejaste hace tiempo, ¿recuerdas? ¡Hasta luego!
El Tercero se marcó rápidamente para no llegar tarde, dejando sola a una malhumorada Fuyiko, que soltó una maldición.
-¡Yuzird…! Grrr, esto no puede quedar así. Veo que no tengo que más remedio que recurrir a esto…-dijo Fuyiko sacando su teléfono móvil.
Esa tarde, Yuzird y Diussa lo pasaban bien tomando un café en un bar. El teléfono de la mujer empezó a sonar, interrumpiendo la dulce velada de la que estaban disfrutando.
-Perdona, parece importante, tengo que cogerlo-se disculpó Diussa.
-¿Trabajo ahora? Parece que estáis muy ocupados intentando pensar un plan contra el Tercero, ja, ja, ja.
-Bueno, no pienso darte pistas-le sonrió mientras se alejaba para atender la llamada-.
Aunque este número, si no recuerdo mal…
Cuando estuvo lo suficientemente lejos de Yuzird, contestó.
-¿Qué quieres? No me fio de ti. Aunque después de lo que ocurrió la última vez, admito que tienes muchas agallas para volver a llamarme, Fuyiko Mine…
-Sí, bueno, la cosa es que tengo una nueva oferta para ti. Me gustaría reunirme contigo de nuevo-se oyó la voz de Fuyiko desde el teléfono.
Tras pensarlo unos segundos, Diussa tomó una decisión.
-Mañana a las 10:00 en el muelle de la ciudad. Si tienes valor, claro…
Al día siguiente, Diussa esperaba junto a Inobi a que llegara Fuyiko. No la hizo esperar mucho. A las 10:00 vieron llegar a una mujer en D-Wheel. Se quitó el casco revelando así su identidad.
-Aquí estás, Fuyiko Mine-dijo Diussa con un gesto impasible.
-Dije que vendría, ¿no? No había ninguna razón para desconfiar.
-Dado lo que ocurrió la última vez, no estoy de acuerdo.
-Aquello fue un malentendido. El Tercero me la jugó.
Aunque Diussa mantenía la compostura, Inobi sí se mostraba extremadamente furioso.
-Ah, hola de nuevo-le saludó Fuyiko, provocando que éste estallara de ira.
-¡Tú mataste a Fajus, zorra!
-Ah, sí, aquel tal Fajus… No tenía más remedio. Quería matarme-se encogió de hombros la mujer-. ¿Qué habrías hecho vosotros en mi lugar? Fuisteis vosotros mismos los que lo enviasteis a por mí. Si lo que quieres es una disculpa, siento haberte dejado sin amante.
Las disculpas de Fuyiko no sonaban para nada sinceras, lo cual enfureció más a Inobi.
-¡Esto no quedará así! ¡¿De verdad vamos a negociar con esta mujer traicionera, señorita Diussa?!
-Lo cierto que yo tampoco me fio de ti, Fuyiko. Y no creas que Fajus solo era importante para Inobi. También lo era para mí-frunció el ceño Diussa, expresando su enfado-. Tanto Inobi como Fajus me han apoyado durante mucho tiempo. Que mataras a Fajus no puede quedar indemne. Y tampoco puedo estar segura de que esto no sea otra de tus tretas, así que…
-¿Acaso eres de las que deja que las emociones reine sobre sus acciones? Creía que eras alguien con más autocontrol.
-Provocarme no te va a salvar. Esto es lo que vamos a hacer. Solo he venido acompañada de Inobi, el cual quiere matarte. Yo no se lo pienso impedir, ya que al fin y al cabo también estoy resentida contigo por haber matado a Fajus. Si quieres que te escuche, si quieres que hagamos negocios, muestra tu fuerza. Vence a Inobi, y entonces hablaremos-le propuso a Fuyiko-. Si tienes el valor de haber venido hasta aquí sola, debes de confiar bastante en tus habilidades, ¿no es así?
-Eres muy radical, pero está bien, lo haré-aceptó Fuyiko bajándose de la D-Wheel, a la vez que acoplaba el duel-disk insertado en este a su brazo izquierdo-. ¿Estás listo, ninjita?
-Pronto lo comprobarás, querida-preparó su duel-disk, sonriendo ante la oportunidad que su señor le había dado de vengarse.
Había otra razón por a la que a Diussa le venía bien deshacerse de Fuyiko. Había investigado sobre ella y descubierto que una vez fue pareja del Tercero. De vez en cuando, trabajaban juntos también. Aunque no fuera su estilo, pensaba aprovechar la oportunidad que se le presentaba de quitar de en medio a alguien que podría interponerse entre su relación con Yuzird.
-Acaba con ella, Inobi.
-Claro, señorita Diussa.
-¿Empezamos? ¡Duelo!
Fuyiko 4000 lp |
Inobi 4000 lp |
-Yo empiezo el duelo-tomó Inobi el primer turno debido a su ímpetu de acabar con su oponente-. Invoco a esta preciosidad, Youkai Ninja Shadow Master (1900/1500). Pongo dos cartas bocabajo y termino mi turno.
-¿Otro con ninjas?
-Los míos son diferentes a los de Fajus, ya lo verás.
-Entonces me toca. Veamos, primero activo mi carta de campo, Paraíso del Engaño, e invoco a la Dama del Engaño-Ángel Helada (1400/1000). Por su efecto, te cedo su control.
-¿Me das el control de ese monstruo?
-Al hacerlo, todos los monstruos que controles pierden 300 puntos de ataque por cada monstruo Dama del Engaño que controles. En este momento tienes a la Ángel Helado, así que tanto ella como Shadow Master pierden 300 de ataque.
La Ángel Helada se quedó con 1100 puntos de ataque, y Shadow Master con 1600.
-Por el efecto de mi carta de campo, robo una carta. A continuación activo la carta mágica continua Reunión de las Damas del Engaño. Si controlas un monstruo Dama del Engaño, puedo invocar un monstruo Dama del Engaño desde el deck en el campo de cualquier jugador, pero si lo invoco en el mío debe ser de nivel 4 o menor-explicó Fuyiko-. ¡Invoco a mi campo a la Dama del Engaño-Segadora Carmesí (1700/300)! Y como controlo una Dama del Engaño, puedo invocar de modo especial a Dama del Engaño-Gata Escarlata en el campo de cualquier jugador. La invoco en el mío (1300/1300). Y activo la carta mágica continua Conjuro Helado de la Dama del Engaño. Cuando ataque con una Dama del Engaño, todos tus monstruos pierden 300 puntos de ataque por cada Dama del Engaño que controles.
-Ya entiendo el estilo de juego de Fuyiko-pensó Diussa.
-Infiltras monstruos en mi campo para perjudicarme-comprendió Inobi-. Ya veremos si te sirve de algo, querida, o si mis Youkai te aniquilan antes.
-Exacto, ya lo veremos. ¡Paso a la batalla! ¡Segadora Carmesí, ataca a Youkai Ninja Shadow Master! ¡Tu monstruo pierde 300 de ataque (1300)!
-¡Pero por su efecto, una vez por turno, no es destruido en batalla!
-Aun así recibirás daño-sonrió Fuyiko.
-¡Ugh!
-Ahora se activa el efecto de Shadow Master. ¡Después de batallar, puede invocar un monstruo Youkai de modo especial desde mi mano! Aparece, querida, Youkai Ninja de Ojos Anómalos (1500/1500)-una mujer ninja con un ojo de cada color, y armada con una daga y kunais apareció desde el cielo-. Al ser invocada en presencia de otro monstruo Youkai Ninja, me permite añadir una carta Youkai del deck a la mano.
-Pero mi Gata Escarlata también tiene un efecto. Si añades una carta a tu mano mientras controles un monstruo Dama del Engaño, excepto en la Draw Phase, yo añado una carta Dama del Engaño de mi deck a la mano.
-Ju, no importa. Ya prácticamente te tengo donde quería.
-¿Ah, sí? ¡Pues ataco con la Gata Escarlata a Shadow Master! Vuelve a perder 300 puntos de ataque (1000), y esta vez sí que será destruido en batalla.
-Me temo que no. ¡Activo mi trampa, Youkai Art-Inmobilizer String! Si controlo dos o más monstruos Youkai Ninja, una vez por turno, puedo negar el efecto de un monstruo en el campo hasta el final del turno.
-Y ahora Inobi controla dos Youkai Ninja-sonrió Diussa.
-Niego el efecto de la Ángel Helada, por lo que mi monstruo recupera esos 300 puntos de ataque (1300).
-Entonces nuestros monstruos están empatados y ambos se destruirán.
-No exactamente. ¡Por el efecto de la Youkai Ninja de Ojos Anómalos, una vez por turno, un monstruo Youkai no es destruido! ¡Solo tu monstruo es destruido!
-¡¿Qué?!-instantes después, la mujer como únicamente su monstruo era destruido-. Mi jugada no ha salido exactamente como planeaba, pero pongo una carta tapada. Te toca.
-Entonces el turno del gran Inobi. Invoco de modo normal al Youkai Ninja Killer (1600/1200).
-Puede que tengas cuatro monstruo, pero todos ellos son más débiles que mi Segadora Carmesí.
-¿Eso crees, querida? Me temo que muy pronto cambiarás de opinión. ¡Paso a la fase de batalla! ¡Shadow Master, ataca a la Segadora Carmesí!
-Mi monstruo es más fuerte. Además, el Conjuro Helado de las Damas del Engaño vuelve a reducir su ataque en 300 cuando atacas (1000).
-Pero una vez por turno, el Shadow Master no es destruido en batalla. ¡Ugh!
-Y ahora, por su efecto, este machote me permite invocar un monstruo Youkai desde la mano. ¡Vamos, cariño, Youkai Ninja Death Eye (1650/0)!
-Otro que sigue siendo más débil que mi monstruo. Por mucho que tengas 5 monstruos, ninguno supera al mío.
-Activo de nuevo el efecto de mi carta trampa continua, Youkai Art-Inmobilizer String. Como controlo al menos dos monstruos Youkai Ninja, niego el efecto de un monstruo en el campo. Niego de nuevo el efecto de la Ángel Helada.
-¿Y de que te sirve eso ahora?
-Probablemente Inobi tenga esa carta bocabajo-dedujo Diussa.
-¡Desvelo mi carta tapada, Youkai Shadow Transformation! Con esta carta cambio de sacrificar monstruos en mi campo, puedo invocar monstruos Youkai Ogre desde mi deck. Requerirán sacrificios en función de su nivel, pero no importa.
-Así que por eso le has negado el efecto a la Ángel Helada, ya que no puede ser sacrificada excepto para monstruos Damas del Engaño-comprendió Fuyiko frunciendo el ceño.
-Sacrifico a la Ángel Helada e invoco a Youkai Ogre Gokuw (2350/1400). Sacrifico a Death Eye y Killer para invocar a Youkai Ogre Curse Portal (2650/2200). Y también a Youkai Ninja de Ojos Anómalos y a Shadow Master para invocar a Youkai Ogre Berserker (3000/1000).
-Esos es, Inobi ha invocado a tres nuevos monstruos con los que luchar-sonrió Diussa.
-Y todos ellos superan a la Segadora Carmesí…
-No vamos a escuchar lo que tengas que decir, querida-sonrió Inobi.
-¡Eso es Inobi! ¡Hazle pagar lo que le hizo a Fajus!-le alentó su jefa.
-¡Eso pensaba hacer señorita Diussa! ¡Sentirás mi venganza por habernos arrebatado a Fajus, Fuyiko Mine! Primero de todo, Youkai Ogre Berserker, destruye todas las cartas mágicas y trampas bocarriba que controles. Y gano 400 de vida por cada una de ellas.
La Reunión de las Damas del Engaño, el Conjuro Helado de la Dama del Engaño y el Paraíso del Engaño fueron destruidos.
-¿Qué?
-¡Youkai Ogre Curse Portal, ataca a la Segadora Carmesí!
-¡Argh!-gritó Fuyiko al ser destruido su monstruo.
-Ahora se activa su efecto. Si Curse Portal destruye un monstruo en batalla, revivir un monstruo Youkai en defensa. Le devuelvo la vida a la Youkai Ninja de Ojos Anómalos (1500/1500). Al invocarse en presencia de un monstruo Youkai, añado una carta Youkai del deck a la mano. ¡Prosigo con la batalla! ¡Gokuw, ataca a esa arpía directamente!
-¡Me defiendo con la Dama del Engaño-Clériga del Destello! Si me atacas directamente, puede invocarse de modo especial-apareció en posición defensiva el monstruo de Fuyiko (2200/1800).
-Tch… ¡Destrúyelo, Gokuw!-sacando su bastón, el Youkai Ogre destruyó al monstruo de Fuyiko-. ¡Ahora sí que no tienes monstruos que te defiendan! ¡Youkai Ogre Berserker, ataca directamente! ¡Mad Assault!
-¡Kyaah!-gritó Fuyiko siendo lanzada contra el suelo.
-Eso es, Inobi-pensó Diussa-. Esa mujer mató a Fajus. Y puede ser un estorbo tanto como para nuestra misión de reunir las Joyas Elementales como en mi relación con Yuzird. No es mi estilo, pero lo mejor es que nos deshagamos de ella cuanto antes.
-Mi venganza se pospondrá un turno. Pero antes de pasar, activo el efecto de Gokuw. Lo sacrifico para invocar de modo especial un monstruo Youkai. ¡Aparece, Youkai Ogre Konosuke (2400/1500)! Con este monstruo, descartando un monstruo Youkai Ninja, puedo destruir un monstruo que controles y causarte daño igual a la mitad de su ataque.
-Es decir, que si no revierto la situación en el siguiente turno...-se levantó Fuyiko del suelo, dolorida.
-Morirás-sonrió Inobi, cuya última carta que le quedaba en la mano era un Youkai Ninja-. Termino mi turno.
-Estaba esperando este momento-sonrió entonces Fuyiko-. ¡Activo mi trampa, Reaparición de la Dama del Engaño! Esta carta me permite invocar de modo especial desde el cementerio las mismas Damas del Engaño que hayan sido mandadas al cementerio este turno en el campo de cualquier jugador.
-¡¿Cómo?!-se sorprendió Inobi.
-¡Apareced de nuevo, Ángel Helada (1400/1000), Segadora Carmesí (1700/300) y Clériga del Destello (2200/1800)! La Ángel Helada va a tu parte del campo.
-No piensas rendirte, ¿eh?
-Por supuesto que no-guiño el ojo Fuyiko, robando carta al dar inicio a su turno.
-¡Entonces muéstrame como venciste a mi cariñín! ¡Aplastare esa fuerza y mi venganza será aún más satisfactoria!
-Está bien, tú lo has querido. Activo el Trato con la Dama del Engaño. Si ambos jugadores controlamos monstruos Dama del Engaño, robo dos cartas. E invoco de modo especial a la Dama del Engaño-Cazadora de Almas al haber Damas del Engaño en el campo (800/1600). Por su efecto, si mi oponente controla monstruos Damas del Engaño, puedo recuperar una Dama del Engaño de mi cementerio-explicó Fuyiko-. Recupera a la Gata Escarlata, y por su efecto, la invoco de modo especial (1300/1300).
-Puede que tengas 4 monstruos, pero ninguno de ellos puede hacer frente a mis Youkai Ogre. Y recuera que la Youkai Ninja de Ojos Anómalos impide que un monstruo Youkai sea destruido una vez por turno.
-¿Habías pedido que te mostrará la fuerza con la vencí a tu novio, verdad? ¡Pues aquí la tienes! ¡Sacrifico Damas del Engaño de cualquier parte del campo para invocar a la Dama del Engaño- Nephentes, Reina del Poder!
Las 4 Damas del Engaño del campo de Fuyiko, así como la Ángel Helada del campo de Inobi fueron ofrecidas como sacrificio para la invocación de Nephentes (¿/?)
-¡¿La Reina del Poder?!-se sorprendió Diussa.
-Su ataque y defensa son iguales a la suma de los monstruos sacrificados (7400/6000).
-¡7400 puntos de ataque!-se le desencajó la cara a Inobi.
-Y al haber sacrificado 5 monstruos, todos los monstruos en tu campo ven su ataque reducido a cero-señaló Fuyiko.
-¡¿Qué?!-pero Inobi se recompuso de la sorpresa inicial para inhabilitar la jugada de su oponente-. ¡Olvidas el efecto de mi Youkai Art-Inmobilizer String! Al controlas al menos dos monstruos Youkai, incluyendo un Youkai Ninja, niego el efecto de un monstruo en el campo hasta la End Phase. ¡Niego el efecto de Nephentes!
-Es inútil, si he sacrificado al menos 3 monstruos, niego el primer efecto que actives-indicó Fuyiko-. ¡Niego el efecto de tu trampa!
-¡¿Cómo?!
Con su báculo Nephentes anuló el poder de la trampa de Inobi, y redujo el poder de ataque de sus monstruos a cero (0).
-¡Mis monstruos…!
-¡Acaba con esto, Nephentes! ¡Ataca a Youkai Ogre Berserker! ¡Esfera de Poder!
La Dama del Engaño arrojó una esfera de energía que pulverizó al monstruo de Inobi.
-¡¡Aerghh!!-gritó Inobi, siendo derribado.
-¿Y bien?-miró entonces a Diussa, sonriendo con total confianza-. He superado tu condición.
Diussa comprobó el estado de su compañero. Solo estaba inconsciente. Se levantó y dijo:
-Está bien, Fuyiko Mine. Hablemos de negocios.
El capítulo 46 será: La treta