Athena y los Santos sólo lucharon juntos al final, pues al inicio de la batalla de los dioses, Athena separa a los Santos y los protegió con una barrera que Hades no podía destruir ni siquiera con un golpe de su espada. Si Athena no fuera la chica más buena de la historia y usara toda su fuerza buscando matar al oponente, nunca se hubiera descuidado su defensa al buscar evangelizar a Hades con sus discursos y el dios jamás hubiera tenido una oportunidad de matarla, pues la diosa había bloqueado todos sus ataques previos sin ningún problema. Incluso llevan milenios peleando y ninguno de los dos dioses jamás pudo matarse, lo que significa que eran iguales, aunque Athena gano todas las guerras.
De hecho, cada vez que los Santos intervenían para ayudar a Athena colocaban a Hades contra las cuerdas.
Después del ataque de Seiya, el propio Hades menciona que Athena pudo haber aprovechado esa oportunidad para matarlo.
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Cuando intervinieron los Santos, Athena mato a Hades.
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Simplemente Athena y Hades son comparables en poder, lo único que cambia es la actitud y personalidad de los dioses, pues Athena es buena y nunca busca lastimar y matar al oponente, por el contrario a Hades que realmente buscaba matar a Athena. Un descuido de los dioses o la ayuda de alguien externo podía colocar la batalla a favor de uno de ellos.